El presidente de American dimite por ocultar pagos a sus ejecutivos
La irritación pública por los abusivos salarios y compensaciones que se abona a los ejecutivos no cesa en EE UU después de haber vivido los escándalos de Enron, Worldcom o Tyco, por citar algunos. En el caso de American, esta circunstancia se dio cuando se negociaban rebajas salariales a los empleados para recortar costes y evitar la suspensión de pagos de la mayor aerolínea del mundo. El enfado de los sindicatos, que amenazaron con romper los acuerdos de recortes de costes salariales de 1.800 millones de dólares, y de algunos de los consejeros puso contra las cuerdas a Carty, que el jueves por la tarde en EE UU y tras una sesión del consejo se vio obligado a dejar el cargo.
Y es que mientras Carty negociaba reducir el coste de la nómina de los trabajadores un 20% anual duplicó el salario base de seis ejecutivos para retenerlos (entre ellos el suyo) y volvió a dotar el fondo de pensiones de 45 más para asegurar una solvente pensión en caso de quiebra.
Gary Boetticher, líder del sindicato de pilotos de Washington, certificaba ayer que Carty era un negociador duro pero 'nadie creía lo que decía'. Precisamente, esta falta de credibilidad fue esgrimida al comienzo del consejo por uno de sus miembros, el ex senador David Boren, quien dijo que pediría la renuncia del presidente.
Tras esta renuncia del presidente y consejero delegado que lo ha sido desde 1998, los sindicatos, incluido el más beligerante de los asistentes de vuelo que lo hizo ayer al mediodía, han renovado los acuerdos que han sido dulcificados levemente por el consejo y la nueva dirección de la empresa nombrada tras la tormentosa reunión de ayer.
La dirección de la aerolínea está en manos de Gerard Arpey, hasta ahora director general, mientras que el consejero Edward Brennan, ex consejero delegado de Sears, se convierte en el presidente.
Los acuerdos cerrados alejan de nuevo a la aerolínea, una más del castigado sector en EE UU, de la suspensión de pagos. Pese a todo, ayer Standard & Poor's advertía que American está en vigilancia y que aún puede rebajarle la calificación de su deuda.