Los comerciantes exigen mayor compromiso a los políticos
Reclaman una regulación para los nuevos formatos sectoriales, amparo frente a los abusos de los centros comerciales y medidas de seguridad
Pero además de esta materia, los comerciantes han negociado con los diferentes partidos políticos 'un cuadro de materias de competencia directa del Gobierno autonómico', explicaba Hilario Alfaro a sus asociados en una carta remitida el pasado 12 de marzo. La primera de estas materias es la que se refiere a la profesionalización de los responsables políticos del área de comercio, ya que los empresarios consideran que no tienen un interlocutor que conozca sus negocios y los problemas que llevan implícitos.
Otro de los puntos se centra en la 'modificación de la actual Ley de Comercio de la Comunidad de Madrid, adaptándola a las necesidades presentes, regulando nuevas fórmulas comerciales y mejorando la defensa del empresario que ejerce su actividad de acuerdo a la normativa'. En este sentido, se refieren a la regulación de los nuevos formatos comerciales como los centros de tiendas que venden restos de temporada y a las rebajas, ya que acusan a algunos almacenes de buscar fórmulas para sortear la legislación y poder ofrecer precios más baratos a sus clientes fuera de las fechas establecidas por ley.
Desde Cocem también se reclaman 'fórmulas de equilibrio en derechos y obligaciones que impidan los abusos en la relación entre empresarios del comercio y centros comerciales, así como el establecimiento de una moratoria hasta 2010 en la implantación de grandes superficies'. Los pequeños empresarios acusan a los centros comerciales de impedirles cualquier tipo de modernización y remodelación de los locales, mientras que ellos sí actualizan anualmente las rentas. 'No nos dejan hacer obras para mejorar los locales y actualizar nuestros negocios y en cambio los arrendadores sí pueden hacerlo; nosotros sólo tenemos obligaciones y ellos derechos. Esto nos lleva a algunas paradojas, como la que provoca la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, que muchas veces no se puede cumplir porque los caseros no permiten hacer obras', comenta un comerciante ubicado en uno de los centros que existen en el corazón de Madrid.
Los empresarios piden a la Administración del Estado que simplifique los trámites para el inicio y el desarrollo de la actividad
Escuela de distribución
La propuesta que más ha gustado a los políticos es la creación de una escuela de distribución comercial. 'Queremos recuperar la estima y valoración social del dependiente, al mismo tiempo que se crea una cantera para cubrir todos los puestos que necesita este negocio, porque cada vez es más difícil encontrar encargados de tienda con conocimientos específicos y dependientes con vocación', explica Hilario Alfaro.
Con los partidos políticos también se ha intentado negociar la simplificación de los trámites administrativos para el inicio o desarrollo de la actividad comercial y la puesta en marcha de medidas de adaptación integral de los mercados municipales (que van perdiendo cuota pese a contar con las mejores ubicaciones).
Los comerciantes también se han mostrado solidarios en la búsqueda de respuestas en materia de seguros para dar cobertura a empresarios con dificultades. En este contexto se enmarcan principalmente los peleteros y joyeros, dos gremios muy afectados por los problemas de inseguridad ciudadana. 'Ha habido casos de peleteros que han tenido que dormir en sus propios establecimientos por temor a los robos; pero lo que más preocupa es el encarecimiento de las pólizas de seguro que desde 1998 hasta ahora se han multiplicado por cuatro. Y eso cuando se consigue una cobertura, porque ya hay muchos peleteros que no encuentran quién les asegure', señala José Miguel Martín, secretario general de la Asociación Empresarial de Peletería.
Estos inconvenientes están provocando un abandono del negocio familiar, ya que los herederos no están dispuestos a asumir tantos riesgos. 'Como consecuencia, en muchos establecimientos que se dedicaban a la piel de pelo se han incorporado otro tipo de prendas de cuero, napa, incluso calzado y marroquinería', añade José Miguel Martín.
Con la misma preocupación por los aspectos vinculados a la inseguridad y la cobertura de las aseguradoras se explica Armando Rodríguez, secretario general del Gremio de Joyeros, Plateros y Relojeros. 'Estamos atravesando un momento bajo porque al retraimiento general del consumo hay que añadir todos los problemas de inseguridad. Los comerciantes deben realizar grandes gastos en blindar sus locales, pero además encuentran muchas dificultades para asegurar sus negocios', puntualiza Armando Rodríguez.
A los joyeros, en cambio, apenas les afecta la competencia de las grandes superficies, ya que el consumidor sólo suele dirigirse a los hipermercados o grandes almacenes para adquirir piezas de nivel medio o bajo, mientras que las compras de las joyas de más valor se siguen realizando en las joyerías.
Quienes sí sufren la competencia de las grandes superficies son los comerciantes de las tiendas de alimentación y ultramarinos. Andoni Monforte, director general de Asedas, la patronal de los supermercados, explica que la solución para el pequeño comercio está en la especialización y la calidad. 'El crecimiento de los supermercados ha sido el fenómeno más destacado de los últimos 10 años, sobre todo porque en España había un retraso en este sentido. De todas formas, también están surgiendo con fuerza algunos tipos de establecimientos especializados, como las panaderías y las fruterías de calidad', añade Monforte.
En este caso, los pequeños comerciantes han unido sus fuerzas a los representantes de los supermercados para negociar con los políticos la limitación de horarios comerciales y aperturas en festivos.
La batalla por la equiparación al régimen de la Seguridad Social Unión contra las comisiones de las tarjetas
'Uno de los grandes problemas que tenemos es la equiparación del régimen actual con el de la Seguridad Social', señala Alejandro Goñi, presidente de Pymecsefes, la patronal de las pequeñas empresas catalanas que agrupa a más de 40.000 comercios. Goñi, que prefiere no hablar de negociaciones con los partidos políticos, sino de 'propuestas', cree que éste es el momento para ser escuchados.En el caso de Cataluña los horarios comerciales no es un tema tan espinoso como en otras comunidades autónomas (Madrid, entre ellas) 'debido a que contamos con un fuerte consenso político en contra de la ampliación de horarios', matiza Goñi. Además, hace poco más de dos meses las asociaciones representantes de los botiguers i comerciants firmaron con los sindicatos el manifiesto de la Mesa Social del Comercio con el objetivo de 'llevar a cabo de forma coordinada las acciones orientadas a preservar la ordenación de apertura de los festivos del comercio en Cataluña para que queden garantizados, de manera equitativa, los intereses de los consumidores, así como los de los comerciantes y trabajadores del sector'.De histórico y difícil califica Alejandro Goñi el 'problema de las comisiones que los comerciantes deben pagar por admitir el uso de las tarjetas de crédito en sus establecimientos'. æpermil;ste es uno de los pocos puntos en los que el pequeño comercio coincide con las grandes superficies a pesar de que el impacto depende del tipo de negocio. Por ejemplo, en el caso de las tiendas de electrodomésticos, el porcentaje es superior al que se aplica a los establecimientos de alimentación.'Al final, esto supone un recorte de las tasas de beneficio empresarial y, cuanto mayor es el volumen de negocio, más debe pagar el empresario', añade Alejandro Goñi.El último reto es el que se está poniendo en marcha desde algunas asociaciones empresariales para cambiar el mensaje de cara a sus asociados, llegar mejor a las tiendas de barrio y modernizar la gestión.