Hay que poner la casa patas arriba
Las empresas que deciden adoptar una herramienta para gestionar su responsabilidad social tienen que estar dispuestas a poner la casa patas arriba y lidiar con las sinergias que produce cualquier cambio. Así, según los socios de Deva Comunicación Financiera, la puesta en funcionamiento del mando integral de sostenibilidad implica examinar a la empresa de cuestiones tales como las relaciones con los accionistas, el seguimiento de códigos de buen gobierno, la política de recursos humanos, las relaciones con los competidores, las relaciones con las Administraciones públicas, los contactos con las organizaciones no gubernamentales, la política de comunicación y el respeto al medio ambiente.
Otras empresas, como Sanchis Comunicación, realizan este proceso analizando también aspectos como experiencias, imagen, recomendaciones, entorno, expectativas e historia de la compañía. También incluyen índices de referencia y comparaciones anuales con los competidores.