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Desplome

La confianza económica se desploma en marzo en Europa y en Estados Unidos

Descenso del 12% en los vuelos internacionales de la Unión Europea. Rebaja en las previsiones de la cadena de hoteles Hilton. Desplome del 27% en los resultados del fabricante de artículos de lujo Gucci. Contracción del 7% en las ventas de Federated Department Stores (matriz de los almacenes Macy's y Bloomingdale's)... Se mire donde se mire, las perspectivas de negocio no mejoran ni en Europa ni en Estados Unidos. Y los últimos indicadores publicados a ambos lados del Atlántico reflejan un declive considerable en el sentimiento económico de consumidores y empresas.

Aunque la guerra en Irak empezó el 20 de marzo, los economistas creen que los indicadores de ese mes reflejan ya la 'ansiedad' previa al inicio del conflicto. En la Unión Europea bajaron los indicadores de consumidores, comerciantes e industriales. En Estados Unidos se hunden las expectativas de los jefes de compras de la industria.

El indicador de confianza económica en Europa (ICE), publicado ayer por la Comisión, registró en marzo una caída de 0,6 puntos tanto en la zona euro como en la Unión Europea (UE) en su conjunto, lo que supone una caída no observada desde los atentados terroristas del 11 septiembre de 2001 en Estados Unidos.

El indicador de confianza económica se situó en 97,8 puntos para la zona euro y en 98 puntos para el conjunto de la UE y marcó el punto más bajo de los seis últimos años.

Estos resultados se deben, principalmente, al fuerte descenso del indicador de confianza en el sector del comercio minorista, en combinación con nuevos deterioros de los de confianza de los industriales y consumidores. El indicador de confianza en el sector de la construcción fue el único que resistió la tendencia general a la baja y se mantuvo estable tanto en la eurozona como en la UE.

Incluso antes de conocerse este dato, el analista jefe de Merrill Lynch, David Rosenberg, se preguntaba si no se estaría ya en la segunda recesión que ya se anunciaba. 'Mes a mes se ha ido comprobando como la economía se ha contraído en febrero y marzo'. Los únicos factores que han evitado que el primer trimestre no se quede en números negativos han sido, según Rosenberg, la fuerza con la que comenzó el año y los inventarios de preguerra. Este analista recuerda que el 80% de los datos económicos que se han ido conociendo en marzo están por debajo de las previsiones. Steven Wieting, analista de UBS Warburg, señalaba recientemente que esperaba que los inversores 'entendieran que a las reducidas expectativas en el momento negativo por el que se desenvuelve la economía no se les dará la vuelta rápidamente ni siquiera con una resolución favorable del asunto de Irak'.

El índice de Chicago recoge los problemas de la industria del medio oeste, dominada por el sector de la automoción. Aunque se esperan para hoy los datos de ventas de marzo, algunas de las previsiones que ayer se barajaban pasaban por una fuerte bajada de ventas para los grandes productores de esta área. Ford habría vendido un 4,8% menos; GM, un 5,8%, y DaimlerChrysler se resentiría con una caída de ventas del 7,7%.

A principios de mes, tanto Ford como GM anunciaron una reducción de su producción en EE UU. La mayor es la de la compañía del óvalo, que rebajará la salida de autos de sus líneas de producción un 17%. La empresa presidida por Bill Ford ya ha recortado en varias ocasiones su producción en este país al no poder competir con los descuentos que tras el 11-S puso en marcha la primera automovilística, GM, para animar las ventas. Con todo, GM tampoco se libra y reducirá producción un 10%.

Las empresas de fabricantes de componentes ya han tenido que hacer sus recortes de producción a la vista de la caída de ventas.

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