_
_
_
_
Energía

Japón aportará diariamente al mercado petróleo de sus reservas si estalla la guerra

El Gobierno japonés planea vender 300.000 barriles de petróleo al día de sus reservas en caso de que estalle una guerra en Irak, según publicó ayer el periódico Nihon Keizai Shimbun.

Antes de llevar a cabo el plan, el Gobierno discutiría la salida al mercado de esos barriles con el Gobierno de Estados Unidos, sin prestar atención a las recomendaciones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE).

Japón es uno de los 26 países industrializados pertenecientes a la AIE.

Las reservas de crudo privadas y públicas de Japón alcanzaron los 550 millones de barriles al final de 2002, el equivalente a 171 días de consumo propio.

Las informaciones publicadas por Nikkei son seguidas con mucha atención por los inversores, pues se considera que las informaciones de este medio calan hondo en el Gobierno.

Asimismo, el Gobierno de Japón desveló ayer un plan de acción para frenar el descenso de las acciones bursátiles, que han llevado a la Bolsa a niveles no conocidos en 20 años. La medida, que analistas e inversores han considerado irrelevante, persigue impulsar el precio de los títulos antes de que termine el año fiscal, el 31 de marzo. El valor actual de las acciones amenaza con causar numerosas quiebras.

El plan del Gobierno amplía las trabas contra los especuladores que se benefician con la caída de la Bolsa, los llamados short-sellers, y facilita la recompra de acciones propias por parte de las empresas. Algunas compañías, como Toyota Motor, han apoyado las acciones de su propia empresa comprando títulos. Toyota ha adquirido 140 millones de acciones desde junio.

El Nikkei llegó a caer el martes pasado por debajo del nivel de 8.000 puntos. Ayer, incluso tras conocerse algunas de las medidas del plan del Gobierno, este índice se contrajo casi un 1%.

'Estas medidas son incluso más deprimentes. ¿Es esto todo lo que pueden pensar?', se preguntaba Takehiro Sato, economista de Morgan Stanley en Tokio.

Los balances de las empresas se ven, además, perjudicados por la deflación. Los precios de los mayoristas japoneses cayeron en febrero un 0,9% respecto al mismo mes del año anterior.

El descenso fue menor que la caída del 1% registrada en enero y su relativa mejora se atribuye al alza de los precios del petróleo por la incertidumbre política y económica mundial.

Por otra parte, el Congreso aprobó ayer el nombramiento de Toshihiko Fukui como sucesor del actual presidente del Banco de Japón, Masaru Hayami.

Archivado En

_
_