Las aseguradoras pagaron 12.190 millones por catástrofes el año pasado
Las entidades aseguradoras pudieron amortiguar en parte las voluminosas pérdidas cosechadas en los mercados bursátiles, que han dejado sus reservas en un estado preocupante, según los analistas.
Los pagos por indemnizaciones por las catástrofes ocurridas -tanto las provocadas por el hombre como las naturales- totalizaron 13.500 millones de dólares (12.190 millones de euros), según un informe emitido por Swiss Re, o 13.000 millones de dólares (11.740 millones de euros), según su gran rival, la alemana Münchener Rückversicherung (Munich Re).
Tanto la cifra de la entidad suiza como la de la teutona son una buena noticia para las entidades, ya que recogen una considerable caída desde los 35.000 millones de dólares que tuvieron que pagar en 2001.
Según Swiss Re, la mayor parte de las catástrofes volvieron a ser provocadas por la naturaleza -terremotos, inundaciones y huracanes-, una tendencia acostumbrada desde 1970 y que se rompió en 2001 a causa de los atentados sobre las Torres Gemelas del 11-S.
En 2002, las inundaciones se llevaron el grueso de los pagos por indemnizaciones el pasado ejercicio. De los 4.100 millones de dólares (poco más de 3.700 millones de euros), 3.200 se los llevaron las inundaciones que arrasaron Centroeuropa el verano pasado. Estos son los pagos más elevados que se han registrado nunca por este tipo de catástrofes.
Swiss Re destaca que las pérdidas económicas que se han registrado por este concepto son sensiblemente superiores a las pérdidas aseguradas, ya que, según el informe Sigma de la reaseguradora, las pérdidas totales por este desastre natural han podido ascender a 15.000 millones de dólares.
La entidad asegura, por ello, que algunos países están 'infraasegurados' contra posibles inundaciones y propone una 'sociedad cuidadosamente equilibrada entre el sector público y el privado' para remediar esta carencia.
Según Munich Re, en la última década se han multiplicado por 2,6 el número de las catástrofes naturales con respecto a la década de los sesenta. A la vez, los daños provocados por esta causa se multiplicaron por 7,3 veces en el periodo.
La mayor reaseguradora del mundo estima que los daños causados por catástrofes naturales seguirán creciendo por el crecimiento progresivo de la densidad poblacional en las 'megaciudades'.
En la actualidad, más del 50% de la población mundial vive hoy en día en áreas urbanas. En 1950, esta proporción estaba en el 30%
Las ciudades, según Munich Re, se expanden continuamente a áreas con mayor exposición a desastres naturales. Estas urbes suponen una concentración de bienes que necesitan cobertura. La reaseguradora alemana estima que la ciudad con más riesgo en el mundo es Tokio y la vecina Yokohama, seguida de San Francisco y Los Ángeles. Otras ciudades en el top ten son Nueva York, Hong Kong y Londres.