Salidas para el móvil
Ahorro y búsqueda de nuevos ingresos son las consignas de la industria del móvil, reunida esta semana en Cannes. Mientras se cumple el sueño del UMTS, operadores y fabricantes lanzan una batería de aplicaciones y explotan al máximo la red GSM
Es imposible medir totalmente el pulso de una industria en una feria tecnológica, porque los congresos mundiales, en los que se reúnen cientos de empresas para mostrar lo mejor de sí mismas, son por definición optimistas. Aun en momentos muy duros para el sector, como los del año pasado, cuando se cuestionaba el modelo de negocio de todas las operadoras de telefonía móvil europeas por el resbalón del UMTS, la industria volvió a mostrar sueños de grandeza y excesivo optimismo que no tenían nada que ver con la realidad del mercado.
Sin embargo, el cuento de la lechera ha acabado definitivamente y parece que fabricantes, operadores y proveedores de servicios de la industria del móvil caminan esta vez con los pies en la tierra. En Cannes, donde esta semana se ha celebrado el congreso mundial 3GSM (la mayor feria del sector), hubo frases antológicas (como la de un alto ejecutivo de Siemens deshaciéndose en perdones por prometer milagros a los usuarios) y signos que indican que la industria ha encontrado nuevas respuestas para no quedarse empantanada en la tercera generación de móviles, que ha provocado tanta saturación en los consumidores como disgustos a las operadoras.
En Cannes, el UMTS no fue lo importante. Con unas ventas de teléfonos en retroceso (las estimaciones para 2003 son de 440 millones de terminales, un 5% menos que en el año anterior), fabricantes y operadores necesitan urgentemente 'dejar de lado los debates inútiles sobre las tecnologías empleadas y explicar los servicios y aplicaciones concretas que permiten los nuevos móviles', como afirmó el presidente de Qualcomm (empresa que fabrica chips para celulares).
Ericsson y dos canales de televisión alemanes han lanzado un servicio que permite recibir en el móvil imágenes en color de los programas
El sistema Edge, que funciona sobre la vieja red GSM, multiplica la velocidad actual por cinco y permite hacer casi todo lo que promete el UMTS
La cuestión es convencer a los usuarios de que un móvil no sirve sólo para hacer llamadas de voz y mandar sencillos mensajes de texto. 'Si logramos explicarle a un forofo del fútbol, por ejemplo, que puede recibir en su móvil imágenes en color de cada gol que meta su equipo y enviárselas a los amigos, habremos ganado una batalla. Si logramos que lo entiendan todos los usuarios, habremos ganado la guerra', explica un alto directivo de Vodafone.
Los mensajes multimedia son la esperanza de operadores y fabricantes. El reto, cómo convertir en multimedia los 250.000 millones de mensajes SMS que se mandan al año en todo el mundo, para ir acostumbrando al usuario a las nuevas posibilidades que se abren en la telefonía móvil. Los multimedia, que combinan imágenes, vídeo, texto, gráficos y voz, brindan una enorme batería de servicios y aplicaciones nuevas. Una de las presentadas en Cannes fue la iniciativa de Ericsson y dos canales de televisión alemanes (Prosieben y Sat 1) para que los usuarios accedan a la programación y puedan recibir todo tipo de imágenes de sus programas favoritos en pantallas a todo color y con posibilidad de comunicarse en tiempo real con la cadena. Como paso posterior, y cuando se implante verdaderamente la tercera generación, se proponen emitir la programación a través del móvil.
Hablar en grupo
Otra de las innovaciones que se presentaron en Cannes fue el servicio bautizado como push to talk, que permite que varios usuarios hablen al mismo tiempo desde el móvil independientemente del lugar en el que estén, algo parecido a un walkie talkie para largas distancias. Basado en tecnología IP (de protocolo de Internet), el servicio permite otras aplicaciones más avanzadas, como juegos en línea entre varias personas a la vez y la posibilidad de descargar vídeos. Nokia, Ericsson y Siemens, los impulsores de esta tecnología, buscan actualmente un estándar que permita la interoperabilidad entre los diferentes terminales.
El lanzamiento de esta aplicación se hará en cuanto resuelvan el problema del estándar. Su éxito, sobre todo entre la gente joven, es muy probable, pero la pregunta es si será acogido con el mismo entusiasmo entre los operadores, dado lo barato de la tecnología IP. Al tratar los paquetes de voz como datos, el coste de enviarlos a través de un servidor central es similar a una conexión a Internet. El gasto por usuario baja también significativamente, algo que en los tiempos que corren no pueden permitirse unos operadores con niveles de deuda de miles de millones de euros.
La consigna no escrita en Cannes ha sido el ahorro. El eufemismo utilizado, 'modelos de negocio efectivos', es decir, explotar al máximo las redes existentes para volver a ingresar dinero en caja, mientras se cumple o no el sueño del UMTS. Los operadores necesitan aumentar la velocidad y capacidad de las redes existentes y para ello han encontrado una solución que parece convencer a muchas telefónicas, el llamado sistema Edge, que funciona sobre las viejas redes GSM, pero multiplica su velocidad hasta 118 kilobites (cinco veces más que ahora, tres veces más que el GPRS y a muy poca distancia de la tercera generación).
Edge permite casi todo lo que promete el UMTS, envío de imágenes y vídeos a alta resolución y con una velocidad muy aceptable. Nokia, que ha lanzado ya un teléfono, el 6200, que usa Edge y también es compatible con la tercera generación, afirma que 15 operadores europeos están muy interesados en este sistema. 'No quieren hacerlo público porque supone hacerle sombra al UMTS, en el que se han gastado miles de millones', explica Kari Sundbäck, director de Ventas de Nokia.
Sin embargo, hay que revitalizar el mercado como sea, y el primero en lanzarse a dar servicios con Edge ha sido la británica Mmo2, el cuarto operador de telefonía móvil del país. Edge surgió en principio como una manera de que los operadores que no habían ganado licencias UMTS pudieran comer del pastel del nuevo móvil multimedia.
También fue una alternativa para el mercado americano, que no cuenta con el espectro de radio necesario para ofrecer servicios UMTS. 'Hace un año nadie en Europa veía futuro al Edge estando el UMTS', explicó en Cannes el presidente de Mmo2, Peter Erskine. 'Pero ahora creemos que puede funcionar por el retraso de la tercera generación y, sobre todo, porque su puesta en marcha es mucho más barata'.
Alejarse de la ciencia ficción
Otra de las apuestas del sector para que la mensajería multimedia prenda es, además de las fotografías y los juegos, la música. Operadores, fabricantes, desarrolladores y gigantes de los medios se han aliado en una iniciativa que lleva por nombre Pump up the volumen (Sube el volumen) para impulsar el consumo de música a través del móvil. Su intención es combinar audio de alta calidad, mensajes multimedia y videoclips para atraer a los consumidores.
Más que la descarga de ficheros de música en los móviles, los ingenieros estudian ahora cómo desarrollar servicios que no se vean afectados por la capacidad de memoria, de reproducción y coste. Esas aplicaciones pueden ser, según algunos operadores, noticias con imágenes sobre el mundo de la música, dedicatorias de canciones e interacción personalizada con artistas.
La killer aplication (aplicación con éxito), como en su día fueron los mensajes SMS, está por encontrar. Pero los expertos afirman que en la telefonía multimedia no existirá una sola aplicación usada por todos, sino móviles personalizados a la medida de cada cliente. Las empresas también son un filón por explotar y la industria del móvil no quiere dejarlas aparte. En un proyecto que suena muy futurista pero puede hacerse realidad muy pronto, Hewlett-Packard y Nokia trabajan juntas para lograr la impresión inalámbrica. Con teléfonos de la compañía finlandesa que incorporen la serie 60 (basada en el estándar inalámbrico Bluetooth), con sólo pulsar un botón se imprimirán documentos en la impresora.
Esta vez no se trata de ciencia ficción. Cautela es una palabra que la industria del móvil ha aprendido a pronunciar.
Nadie quiere sentarse junto a Bill Gates
Todo el mundo dejó de lado a Microsoft en Cannes, al menos de cara al público. La compañía de Bill Gates ha sido y sigue siendo el gran caballo de batalla de los grandes fabricantes de móviles, como Nokia, Ericsson, Siemens y Motorola, que no están dispuestos a dejar que Bill Gates repita en la telefonía celular el dominio que protagonizó en los ordenadores. Así, el mismo día de la inauguración del congreso 3GSM en Cannes, Bill Gates desayunó con la amarga noticia de que el único fabricante de móviles que había licenciado su sistema operativo, la coreana Samsung, compraba una participación en la empresa rival de Microsoft en el mercado de los móviles, Symbian, participada por Nokia, Sony Ericsson, Motorola, Matsushita y Siemens. La rueda de prensa de Juha Christensen, vicepresidente corporativo de Microsoft, en la ciudad francesa, tuvo que ser casi improvisada. El directivo fue muy breve en su intervención (quizás se quedó sin argumentos) y sólo alzó el Smartphone (que lleva sistema operativo de Microsoft y chips de Intel) para decir que se podía lograr un 15% más de ingresos por usuario usando su sistema. El auditorio no pareció inmutarse. Hasta ahora, la única operadora europea que han lanzado el Smartphone es la inglesa Orange y la alemana T-Mobile tiene previsto hacerlo en verano. Microsoft, que anunció su entrada en el mercado de los sistemas operativos para móviles hace tres años, ha dedicado más de 1.000 ingenieros y muchos miles de millones de dólares al proyecto. En Europa, sin embargo, la fuerte barrera que desde el principio han puesto los fabricantes ha impedido que Gates haga el más mínimo negocio con su división de móviles. Algunos analistas, como Sherief Bakr, de Merrill Lynch, creen que a Microsoft no le quedará otra opción, después de este nuevo fracaso, que concentrarse en hacer sus aplicaciones compatibles con el sistema de Symbian y renunciar a dominar el mercado móvil.