Iberia reduce la oferta de plazas un 4%
Iberia ha decidido reducir un 4% las plazas ofrecidas por kilómetro recorrido durante el próximo mes de marzo para los mercados nacional y europeo ante la incertidumbre generada por la crisis internacional en Irak.
Según explica la compañía a través de un comunicado remitido ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), esta decisión se suma al aplazamiento en la recepción de tres aviones Airbus A-320 prevista para esta primavera, una posibilidad que ya estaba incluida en los contratos firmados entre ambas compañías.
Fuentes de Iberia explican que la reducción de capacidad forma parte de los planes de flexibilidad incluidos en el plan director de la aerolínea para ajustar la oferta a la demanda. Se trata de medidas 'de precaución rápidas y muy a corto plazo', que se pueden anular en caso de que la incertidumbre se despeje o ampliar a meses posteriores si la compañía lo considera necesario.
Fuentes de Iberia aseguran que las medidas no implican dejar en tierra a ningún avión de la flota. La reducción se implementará bajando algunas frecuencias en determinadas rutas y utilizando aviones de menor ocupación en ciertos tráficos con menor demanda.
La compañía ha limitado la reducción de capacidad a marzo tendiendo en cuenta que a finales del próximo, como es habitual, se cambia la programación de vuelos de la temporada baja por otra adaptada a la época del año de mayor tráfico y que dura hasta el final de octubre.
Semana Santa
El temor de la aerolínea, siempre según las fuentes citadas, es que la incertidumbre bélica continúe durante varias semanas más y afecte a la contratación de reservas para las vacaciones de Semana Santa en abril.
La oferta prevista para vuelos de largo radio, principalmente a Latinoamérica, no se verá afectada por esta medida, puesto que, según las mismas fuentes, estos vuelos no serán tan sensibles a la evolución del conflicto con Irak.
Iberia ganó durante el año pasado 160 millones de euros, tres veces más que en 2001 (53 millones), a pesar de haber sido un ejercicio 'difícil', marcado por la desaceleración económica y los atentados del 11 de septiembre, explico el pasado 31 de enero su presidente, Xabier de Irala.
Ese día, Irala ya apuntó que este año sería 'difícil incluso si no hay conflicto bélico en Irak', pero adelantó que la compañía tiene planes de contingencia para adaptarse a las circunstancias del mercado.
Hace año y medio, tras los sucesos del 11 de septiembre, Iberia llevó a cabo un ajuste previo de capacidad cifrado en el 11% y puso en marcha un plan de regulación de empleo que afecto a cerca de 3.000 trabajadores.
Otra de las decisiones tomadas estos días por la aerolínea ante el clima prebélico existente es aplazar hasta después del verano el proceso de conversión en un holding mediante la segregación de los negocios.