Cascos afirma que el problema en la línea ferroviaria del AVE Madrid-Lleida sólo requiere mantenimiento
El ministro de Fomento, Francisco Alvarez Cascos, ha declarado que el problema geotécnico registrado en un tramo de cinco kilómetros de la nueva línea ferroviaria de Alta Velocidad (Ave) Madrid-Lleida a la altura de Pina de Ebro (Zaragoza) "sólo afecta a la tolerancia para la comodidad y no a la seguridad". Así lo ha asegurado durante su comparecencia en la Comisión de Infraestructuras del Congreso al manifestar que dicho problema "no requiere actuaciones que revistan inquietud, sino labores de mantenimiento más intensas de las habituales".
Asimismo, Cascos ha anunciado que el trayecto de la vía de alta velocidad será inaugurado por trenes de los fabricantes Alstom y Talgo, aunque ha declarado que "queríamos contar para la inauguración de esta línea de alta velocidad, con unidades de los dos fabricantes que ganaron el concurso convocado por Renfe, Talgo y Siemens, pero ha sido imposible conseguirlo en el caso del fabricante alemán". La explotación de la línea se llevará a cabo hasta la llegada de los nuevos trenes de Siemens y de Talgo, en 2004, con las unidades del modelo Alstom que circulan en el AVE de Madrid a Sevilla, y los Talgo del modelo Altadia.
El ministro ha explicado que, pese a todos los intentos realizados tanto por la empresa ferroviaria Renfe como por el ministerio de Fomento, no ha sido posible alcanzar un acuerdo con los ferrocarriles alemanes para conseguir el alquiler de dos unidades de un modelo Siemens parecido al que circulará en el futuro por la línea de alta velocidad.
En la comisión del Congreso, Cascos ha pedido a todos los grupos comprensión ante el retraso de la entrada en funcionamiento de esta línea de alta velocidad que tenía que haberse inaugurado a finales de 2002 y remarcó que lo más importante es la seguridad y la prudencia. Asimismo, ante la críticas vertidas por el inicio de la explotación de la línea con unidades a una velocidad inferior a los 350 kilómetros por hora previstos, ha recordado que el AVE Madrid-Sevilla se inauguró con la velocidad limitada a 250 kilómetros por hora y que luego se fue incrementando paulatinamente hasta llegar a alcanzar en 1994 los 300 kilómetros por hora.