La banca pone el foco en los inmigrantes
El envío de dinero de los trabajadores extranjeros a sus países se ha convertido en una oportunidad para la banca tradicional
Cerca de dos millones de clientes potenciales que mueven más de 2.000 millones de euros al año y una tasa de crecimiento anual del 20%. Estas son las claves del negocio de gestión de transferencias al extranjero por parte de inmigrantes.
Hasta ahora esta actividad había estado acaparada por 51 establecimientos autorizados por el Banco de España, cuyos líderes son Western Union y MoneyGram. Sin embargo, son varias las entidades financieras españolas que ya han puesto sus ojos en el importante filón que supone este nuevo segmento de mercado. Es el caso, por ejemplo, del BBVA, que ha creado una sociedad denominada Dinero Express, que tiene previsto abrir unas 15 oficinas antes de junio de este año.
También el SCH y La Caixa se han aventurado en este terreno, tratando además de fidelizar a los inmigrantes que envían dinero como clientes de la entidad.
Juan Pedro Moreno y David Cordero, de Accenture, aseguran que se trata de un buen negocio en crecimiento. El mercado de envío de transferencias es todavía muy poco maduro, con un grado de concentración muy bajo y comisiones muy altas, por lo que, entre otras cosas, hay una oportunidad para entrar a competir vía precio.
Además, según los expertos de Accenture, la inmigración tiene en España un carácter estable, 'con filosofía de echar raíces, con lo cual son clientes potenciales'. Es un buen negocio, 'que crece a tasas del 20%, cuando no hay nada que en el mundo financiero crezca a ese ritmo', explica Juan Pedro Moreno. Pero como todos los negocios, requiere una inversión y una serie de infraestructuras que pueden suponer una traba para las entidades de pequeño y medio tamaño.
Es aquí donde entra en juego la oferta de Accenture. La consultora tiene un plan que contempla la gestión del negocio para las entidades financieras que quieran entrar en el negocio de envío de dinero de inmigrantes sin gestionarlo directamente. 'Es una forma de no asumir todos los riesgos que entraña una inversión de este tipo donde lo lógico es que con la competencia los precios de las comisiones, que en la actualidad son muy altas, tiendan a caer', asegura Moreno.
El centro de negocios de Accenture, al que se podrán adherir las entidades financieras interesadas, dispondrá del personal necesario para realizar las operaciones de acuerdos comerciales con los distintos países de exportación de dinero y con la infraestructura necesaria para desarrollar las operaciones. Eso sí, cada entidad podrá seguir operando con su propia marca.
La iniciativa de normalizar el negocio del envío de dinero por parte de los inmigrantes cuenta con el apoyo del Banco de España, que tendrá más facilidad para censar el dinero que se mueve.
Una alta concentración geográfica
La distribución geográfica de la inmigración en España no es homogénea. Navarra, Madrid, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía y Canarias son las comunidades autónomas que concentran la mayor parte de los trabajadores extranjeros. Esa es la razón por la que Accenture dirige su mirada, en especial, a las cajas de ahorros que tienen una localización específica en estas zonas. 'Entidades como Caja Mar, Caja Granada, Caja Murcia o las cajas catalanas tienen la idea de entrar en el negocio del envío de transferencias al extranjero por parte de inmigrantes entre sus prioridades', aseguran Juan Pedro Moreno y David Cordero, de Accenture.El servicio de la consultora permite que estas entidades ensayen el negocio con un riesgo limitado. Además, el segmento de población procedente de la inmigración puede convertirse en una oportunidad para que estas entidades logren 'bancarizar' a estos clientes y ofrecerles servicios adecuados a su perfil.