La confianza de los consumidores de EE UU cae al nivel de 1993
La confianza de los consumidores estadounidenses cayó en febrero a 79,2 puntos, el nivel más bajo desde septiembre de 1993, según informó ayer la Universidad de Michigan. La amenaza de guerra en Irak y sus consecuencias sobre la economía pesan sobre el optimismo de los ciudadanos. El estado de ánimo de los consumidores es fundamental, porque su gasto representa dos tercios de la economía de EE UU.
No obstante, la confianza y el gasto no siempre muestran una relación tan estrecha. De hecho, las ventas minoristas alcanzaron en enero su mayor incremento en dos años. La caída del índice invierte una tendencia de dos meses consecutivos de ascenso, que había llevado al indicador de la Universidad de Michigan a registrar los 82,4 puntos en enero. Los economistas esperan que se repita la situación de 1991. Entonces, la confianza se disparó en cuanto quedó claro que la guerra contra Irak iba a ser corta y victoriosa.
Producción industrial
En contraste con los malos datos por el lado de los consumidores, la producción industrial creció en enero un 0,7%, lo que representa el mayor incremento mensual desde julio de 2002. Las temperaturas más frías de lo previsto impulsaron la producción del sector de servicios públicos, que creció un 4%.
Otro indicador positivo para la economía fue el de los inventarios de los negocios, que crecieron en diciembre un 0,6%, lo que representa el octavo aumento consecutivo. Algunos expertos ya vaticinan una fuerte recuperación. La Asociación Americana de Economistas de Empresas (Nabe, en sus siglas en inglés) pronosticó ayer que el PIB estadounidense crecerá un 2,7% este año y un 3,6% en 2004.
Respecto a los consumidores, los expertos de la Nabe prevén que aumenten sus gastos un 2,7 % en 2003, tras la progresión del 3,1% de 2002. Según los economistas, el IPC repuntará un 2,3% frente al 1,6% del año pasado. Asimismo, la mayoría de los expertos cree que la depreciación del dólar respecto al euro continuará a lo largo de este año.