El BBVA obtuvo 530 millones en plusvalías por la venta de participaciones en 2002
El grupo BBVA obtuvo durante el pasado ejercicio 530 millones de euros en plusvalías con la venta de participaciones en diversas empresas, entre las que destacó Metrovacesa, que proporcionó al banco alrededor de 375 millones de euros de beneficios.
El banco que preside Francisco González se deshizo el pasado año de un 27,7% de Metrovacesa (un 23,9% fue adquirido por Bami) y al cierre del ejercicio sólo mantenía un 0,58% de su antigua filial inmobiliaria, según consta en las Cuentas Anuales e Informe de Gestión 2002 del banco. Estos informes, que tendrán que ser aprobados por la Junta General de Accionistas que se celebrará en Bilbao el próximo 1 de marzo, reflejan también la desinversión del banco en Iberdrola, del 1,75%, que le reportó unos beneficios de 75 millones de euros.
El banco mantiene aún en la eléctrica una participación del 9,14%, del que un 6,39% corresponde al porcentaje mantenido con criterios de permanencia. El BBVA también vendió una participación del 7,641% en Acerinox, con unas plusvalías de 66 millones de euros, y al cierre del ejercicio poseía el 9,69% de esta compañía, del que un 5,01% tiene vocación de permanencia, según consta en las cuentas anuales.
Las desinversiones del BBVA también se materializaron en el 4,612% del capital de Acesa, con unas plusvalías de 20 millones de euros, y en el 0,037 de Telefónica, lo que proporcionó a la entidad bancaria un beneficio de ocho millones. En Telefónica el banco es propietario de un 6,53% (un 5,28 tiene criterio de permanencia), mientras que en Acesa apenas contaba al cierre del 2002 con un 0,12%.
Prejubilaciones y fondos de pensiones
La auditoría de BBVA informa que el banco cargó contra reservas 324,46 millones de euros en las cuentas consolidadas del grupo correspondientes al coste estimado de las prejubilaciones de unos 1.439 empleados. La cifra, neta de su correspondiente efecto fiscal, incluye tanto las indemnizaciones como retribuciones diferidas y aportaciones futuras a fondos externos de pensiones. El coste total bruto ascendió a 575,90 millones de euros.
En 2001, había cargado contra reservas 479,24 millones de euros, netos de impuestos, por la prejubilación de 1.887 empleados. El coste total de dichas prejubilaciones ascendió a 731,74 millones.
Perspectivas futuras
El BBVA explica que el ejercicio 2003 constituye para la entidad "una nueva etapa" que se centrará, desde el punto de vista de la gestión, en un "crecimiento rentable", una nueva aproximación al cliente, una cultura corporativa orientada a esos objetivos y un "sólido" gobierno corporativo.
La entidad bancaria aspira a convertirse en "uno de los tres primeros bancos de euro en rentabilidad, eficiencia y crecimiento del beneficio por acción (BPA).