Cascos insiste en que la seguridad marcará los plazos del AVE
El ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, señaló ayer que 'es mucho más importante garantizar la seguridad del tren y de sus pasajeros que el plazo de inauguración, pero insisto en que el AVE estará funcionando en pocas semanas'. Cascos se refería a la línea de tren de alta velocidad que une Madrid con Lleida y que está sufriendo retrasos por los problemas de señalización.
Técnicos de Renfe y del Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) consideran que los trenes deberán circular a una velocidad máxima de 200 kilómetros por hora durante, al menos, este año debido a esas deficiencias. La línea está diseñada para que por ella los trenes vayan hasta 350 kilómetros por hora, siempre y cuando la señalización sea la adecuada.
Cascos señaló que se están realizando las pruebas oportunas que garanticen la seguridad a esa velocidad con el sistema tecnológico ERMTS, homologado por la UE. Mientras ese sistema no funcione, se utilizará el antiguo, denominado ASFA y que sólo permite alcanzar velocidades de 200 kilómetros por hora.
El PSOE, por boca de la diputada por Lleida y secretaria general adjunta del Grupo Socialista, Teresa Cunillera, consideró ayer 'peligrosas e insensatas las excusas de Álvarez-Cascos. Si tras siete años de obras y con el gran desembolso que ha supuesto la línea no hay aún garantías de seguridad, es que la obra no se ha hecho bien'.
Ley Ferroviaria
Por otra parte, Cascos se refirió al anteproyecto de Ley Ferroviaria y señaló que 'se ha recibido un informe extraordinariamente positivo del Consejo Económico y Social, que ha estudiado las transposiciones de la UE que deben contemplarse en esta nueva legislación'.
Actualmente, el anteproyecto ha sido remitido al Consejo de Estado, que tiene dos semanas para dar su dictamen a Fomento 'y entonces se hará llegar al Consejo de Ministros para su estudio y aprobación'. El anteproyecto ha generado un duro enfrentamiento entre Fomento y Hacienda por la asunción de la deuda de Renfe.