La CMT mediará para solucionar la financiación del servicio universal
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) estudió ayer distintos aspectos de la modernización del servicio público telefónico, y asumió su papel de mediador entre las posturas enfrentadas del Gobierno y de las operadoras sobre el sistema de financiación.
El conflicto se ha suscitado a raíz de la aprobación por el Consejo de Ministros del anteproyecto de la Ley General de Telecomunicaciones, en el que se incluye la definición y reglamentación del servicio universal.
El texto considera que esta actividad empresarial debe garantizar el derecho de todos los españoles a recibir diversos servicios telefónicos básicos, 'con independencia de su localización geográfica'.
En esta perspectiva, el anteproyecto afirmaba que el coste neto de la obligación del servicio universal 'será financiado por un mecanismo de compensación con cargo a fondos públicos y en condiciones de transparencia, o por determinadas categorías de operadores, o a través de un mecanismo mixto'.
Recientemente, la patronal de las empresas de telecomunicaciones, Aniel, ha denunciado que en el proyecto de ley aprobado ha desaparecido la posibilidad de que el servicio universal sea financiado con cargo a 'fondos públicos'.
Fuentes cercanas al Gobierno han reconocido que el Ministerio de Hacienda 'considera absolutamente inviable que los Presupuestos Generales del Estado financien el servicio universal', y aunque no admiten que se haya modificado el proyecto de ley, afirman que su texto 'deberá perfeccionarse en el trámite parlamentario'. El objetivo de Ciencia y Tecnología sería, según estas fuentes, conseguir que la financiación fuera mixta, entre fondos públicos y privados.
En medio de la polémica, ayer, el consejo de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones estudió la modernización del servicio universal y sus costes. Fuentes cercanas a este organismo arbitral aseguraron que, aparte de una resolución sobre el servicio de información 1003 (que ahora pasa a marcarse con la numeración 11818), no se adoptó ninguna otra decisión sobre el servicio universal.
El Ministerio de Ciencia y Tecnología, no obstante, ha querido que la CMT le asesore sobre este complicado problema, teniendo en cuenta que el regulador ha sido tradicionalmente el encargado de decidir si Telefónica tenía derecho a cobrar por la prestación del servicio universal y definir su coste a partir de los datos de la operadora.
En este sentido, Telefónica asegura que en 2001 el servicio universal le supuso un coste de 271 millones de euros. La CMT no se ha pronunciado sobre esta cifra, pero en el ejercicio de 2000 aceptó que Telefónica había gastado 268 millones en dar cobertura al servicio universal, tras haber rebajado la propuesta inicial presentada por la empresa que preside César Alierta.
Fuentes cercanas a la CMT aseguran que la definición final de la procedencia de los fondos que servirán para financiar el servicio universal se realizará en el reglamento de la Ley General de Telecomunicaciones. Esta norma podría estar aprobada en el cuarto trimestre de este año.
Competencia y restricciones para el 1003
A la espera de que la CMT medie en la polémica sobre la financiación y el coste del servicio universal, el regulador va puliendo las obligaciones que lo componen. Una de ellas es el servicio de atención de Telefónica, el antiguamente denominado 1003, cuya liberalización está naciendo con fuerte conflicto entre los que quieren operarlo.La CMT decidió ayer estimar parte de una denuncia de Telegate e impedir que Telefónica ofrezca servicios adicionales, como la ejecución de la llamada, a través del nuevo número que sustituye al 1003 -el 11818-, ya que podría suponer una ventaja competitiva para ella. La operadora ha anunciado que recurrirá la decisión, entre otras cosas, porque contraviene la propia doctrina del regulador, que en junio aprobó la progresión de llamada. También asegura que no supone una ventaja competitiva, puesto que el cambio de numeración deja a todas las competidoras con las mismas armas. Telefónica, además, tendrá que enfrentarse a un nuevo rival y de su misma casa. TPI anunció ayer la puesta en marcha de su propio servicio de información, en el 11888.