La SEPI, Sener y Gamesa fracasan en la creación de un grupo aeronáutico
La creación de Alerion, el proyecto para constituir el primer grupo aeronáutico español, no ha salido del hangar. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Sener y Gamesa anunciaron ayer que renuncian 'por la imposibilidad de acomodar las expectativas e intereses de las partes' a la integración de los activos aeronáuticos de Gamesa y al 53% de Industria de Turbo Propulsores (ITP), fabricante, principalmente, de las turbinas que equipan a los motores de los aviones.
El encaje o no de la multinacional británica Rolls- Royce en el capital de Alerion ha resultado definitiva para frustrar una operación anunciada en abril del pasado año.
La compañía del Reino Unido, titular del 47% del accionariado de ITP, había anunciado su intención de estar en Alerion, pero a la vez, según fuentes consultadas, mostraba su recelo por participar en una compañía en la que uno de los objetivos era su salida a Bolsa.
La futura presencia en el parqué de Alerion, tal y como estaba previsto en los acuerdos firmados entre sus promotores, abría una vía a que posibles competidores de Rolls entraran en el capital de Alerion.
En la ruptura ha influido también que la prevista salida a Bolsa de Alerion debía retrasarse. Esta decisión se había adoptado por la situación de los mercados de valores y porque el tiempo pactado para su incorporación al parqué era escaso. En un principio se anunció que a primeros de este año se iba a convertir en una sociedad cotizada.
El fin del acuerdo entre la SEPI, Sener y Gamesa supondrá para ésta iniciar un proceso de búsqueda de alianzas para encontrar un comprador a su negocio aeronáutico que tiene una consolidada cartera de pedidos. Esta estrategia, cuya caducidad finaliza en 2005, se contempla en el actual plan de negocio.
Por su parte, ITP, también con contratos que garantizan sus ventas hasta 2007, tiene previsto cerrar ahora un multimillonario contrato con Rolls-Royce, que fue anunciado hace dos años.