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De temporeros a exportadores agrícolas

Diecinueve pueblos de la sierra de Cádiz han puesto en marcha el programa comunitario Adaptagro para reconvertir su débil economía rural a la producción ecológica para la exportación

La sierra de Cádiz es una zona rural tan pobre que si alcanzó la fama en la España del siglo XIX fue por la eficacia demostrada por curtidos bandoleros y contrabandistas en sus quehaceres. Erradicado el problema de la seguridad rural, la precaria economía serrana se ha sustentado desde entonces en la agricultura y ganadería más o menos intensiva.

Pero sus habitantes, tanto temporeros como empresarios y cooperativistas, han decidido transformar radicalmente, todos a una, su sistema productivo agrícola, basado en la explotación tradicional de sus cultivos del olivar, la horticultura, el viñedo y la ganadería para sumarse a lo que demanda el mercado europeo: la agricultura y ganadería ecológicas.

Los 19 municipios que conforman la serranía gaditana, agrupados en la Mancomunidad de Municipios de la Sierra de Cádiz, han puesto en marcha el programa específico Adaptagro, integrado en el programa genérico Equal de la Unión Europea, cuyo objetivo principal es conseguir superar las dificultades de algunos colectivos de Europa para acceder a la modernidad y la igualdad productiva, laboral y social.

La intención del programa es conseguir que los productos de la zona lleguen a un mercado europeo en el que los productos ecológicos alcanzan ya niveles de hasta el 50% del consumo en países como Alemania o Suiza, aunque en España es mucho menor. El 90% de la producción ecológica española se destina a la exportación.

Una de las primeras consecuencias positivas de la aplicación de este programa es 'la desaparición de la guardería para hijos de los temporeros que había en la mancomunidad', cuenta Agustín Barberá, delegado de Empleo de la Junta de Andalucía en Cádiz. 'En una época de fuerte inmigración extranjera gran parte de los habitantes de esta zona vivían aún de trasladarse como temporeros a otras zonas agrícola españolas', explica Barberá.

El delegado subraya que la iniciativa de convertir toda una comarca a la producción ecológica es novedosa y 'su objetivo es establecer un eje que abarca a empresas, a un sector y a una comarca'.

El programa está dotado con más de dos millones de euros para financiar cursos y proyectos de investigación para trabajadores del campo, jornaleros o empresarios. El proyecto está financiado en un 75% por el Fondo Social Europeo y en el porcentaje restante por la Junta de Andalucía y la mancomunidad.

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