El PSOE acusa al Gobierno de §pasividad§ para hacer frente a la inflación
El secretario de Política Económica del PSOE, Jordi Sevilla, ha señalado hoy que la subida del 4% en 2002 del Indice de Precios de Consumo (IPC) "certifica que las previsiones del Gobierno son cuentos que nada tienen que ver con la realidad del país ni con la de los ciudadanos".
Sevilla ha apuntado en un comunicado "la pasividad" del Gobierno a la hora de hacer frente a la inflación, puesto que, en su opinión, el Ejecutivo "no ha hecho ni hace nada, mientras los ciudadanos perdemos poder adquisitivo, las empresas pierden competitividad y España pierde peso y credibilidad entre los países de nuestro entorno".
En este sentido, ha añadido que "la inflación es un grave problema que está afectando muy negativamente a nuestra economía, y con ello al bienestar de los ciudadanos y al futuro de nuestro país". Además, ha considerado que el incremento de los precios "es el impuesto más injusto porque afecta a todos, con independencia de su nivel de renta, y perjudica más a quienes menos ingresos tienen".
Por su parte, la CEOE constatado hoy que 2002 "no ha sido un buen año para la evolución de los precios", debido tanto a la introducción del euro y a sus "perniciosos efectos" de redondeo, como a los desequilibrios que atraviesa el mercado petrolífero por los distintos conflictos de los países productores.
La patronal advirtió de que la tasa de inflación final y el diferencial que España mantiene con el resto de países de la Unión Europea "pone en peligro la competitividad del aparato productivo español", por lo que reclamó un incremento de la productividad.
Menos poder adquisitivo
Por su parte, CCOO ha asegurado hoy que un total de 1.405.139 trabajadores perderán poder adquisitivo por tener pactados incrementos salariales inferiores a la tasa de inflación final de 2002 (4%) y no disponer en su convenio de cláusulas de revisión salarial para corregir esta situación.
El sindicato ha explicado que también perderán poder de compra muchos empleados públicos que vieron "limitada" su subida salarial en 2002 a la previsión de IPC del Gobierno, y que no contaban tampoco con cláusula de revisión.