América Latina distancia al Ibex de los mercados europeos
Todavía son una fuente de riesgo y no de ingresos, pero la mejora de la situación en las últimas semanas implica que los inversores pueden dejar de descontar el peor de los escenarios. Así, el Ibex marcha mejor que el Euro Stoxx 50.
Esta ventaja se notó especialmente en la sesión del miércoles, cuando Europa bajaba significativamente, pero el Ibex subió. Telefónica, BBVA, Endesa, Santander y Repsol salvaron la jornada, después de que Argentina decidiese eliminar las restricciones al cambio de moneda gracias a la relativa estabilidad en la cotización del peso. Un año después, las compañías con intereses en la zona empiezan a ver la luz.
Lo que más temía el mercado durante 2002 era Brasil. Según algunos expertos, cuando el Ibex bajaba era porque las encuestas electorales anticipaban la victoria de Lula. Aunque los índices de todo el mundo, los brasileños incluidos, bajaban en igual medida.
Ganó Lula, por goleada. Y la certidumbre sobre el Gobierno ha ayudado mucho a la cotización del real. El nuevo presidente moderó su discurso después de ser elegido y agrupó en su gabinete a ministros con buen predicamento en el mercado y a compañeros del Partido de los Trabajadores. Ha afirmado su voluntad de mantener la disciplina presupuestaria, hacer frente a los pagos de la deuda externa y controlar la inflación.
Algo, dentro de todo, lógico, pues no sería razonable provocar una tormenta financiera en el país nada más llegar. Pero estas declaraciones han servido para reafirmar la tendencia alcista del mercado brasileño y también para congraciar a Lula con los analistas.
No obstante, la desconfianza del mercado no puede darse por superada. Una nueva recaída de los mercados internacionales, que podría desatarse por la guerra en el golfo Pérsico, seguramente afecte más a las plazas financieras más débiles, entre las que están las latinoamericanas.
Por otro lado, y como no sólo de la Bolsa viven las empresas, queda por ver el impacto real en los resultados de esta mejora aparente de la situación. ¿Se habrán acabado las provisiones? ¿Repuntarán los ingresos? Además, Venezuela puede hacer daño. Santander tiene allí un negocio no muy importante en volumen, pero sí muy rentable.
Pendientes del dólar
Es el tema de moda en los informes de análisis. El euro ha alcanzado niveles frente al dólar que no se registraban desde 1999 y los expertos tratan de adecuar sus carteras al nuevo escenario. Hay dos teorías contrapuestas. Por un lado, la fortaleza del euro y las expectativas de nuevas apreciaciones invitan a los inversores a traer el dinero a Europa. Pero, por otro, está el conocido dicho de 'dólar fuerte, Bolsa fuerte', que está afectando negativamente a los mercados, especialmente a los europeos. Consideran algunos analistas, no obstante, que la fortaleza del euro no es tal, sino que simplemente se trata de una recaída del dólar vinculada a las dudas sobre la evolución de la economía del país. Credit Suisse, en su último informe estratégico, apostaba por una solución salomónica. La entidad suiza aconseja a los inversores no tener en cuenta la evolución de las divisas a la hora de confeccionar las carteras. Un alza del euro puede redundar en una reducción de la inflación y, por lo tanto, en un mayor margen de maniobra para bajar los tipos.