La nueva Lexus facturará 50 millones en su primer ejercicio
La nueva Lexus España, independizada de su matriz Toyota, prevé facturar 50 millones de euros en el que será su primer ejercicio, el de 2003. La marca de berlinas de lujo espera unas ventas de 1.500 unidades el próximo año, un 15% más de las previstas para el cierre de 2002.
'Funcionar de manera separada nos va a permitir crear imagen de marca exclusiva sin la influencia de un fabricante generalista como Toyota', explica Pedro Escudero, director general de Lexus España.
La nueva organización española de Lexus opera desde el pasado mes de octubre, cuando Toyota asumió el 100% de la distribuidora Toyota España, hasta entonces participada al 65% por el grupo Bergé. En los acuerdos alcanzados con la multinacional japonesa, este importador español -que ya trabaja con Hyundai, Chrysler, Ferrari o Rolls- logró retener la comercialización de Lexus.
La sociedad Lexus España nace con un capital social de seis millones de euros y un volumen de negocio calculado en unos 10 millones de euros en sus primeros tres meses, de octubre a diciembre.
Las perspectivas son positivas pese a la caída del mercado generalista, ya que el segmento llamado premium sigue creciendo. 'Ha habido un aumento tan espectacular que algunas marcas sufren un exceso de ventas que no puede absorber el servicio posventa. Nosotros hemos decidido crecer como la red', añade Escudero. Lexus tiene 23 concesionarios en España, cuatro más que hace un año, lo que alcanza a un 85% de su público potencial. La expansión fue rápida, puesto que en 1999 sólo había dos vendedores de la marca.
Tras consolidarse en Estados Unidos, donde la marca japonesa de vehículos de lujo lidera su segmento, Lexus se ha marcado el reto de competir en Europa con marcas alemanas tan afianzadas como Mercedes, BMW o Audi. Pero, frente a las 250.000 unidades que Lexus vende anualmente en el mercado norteamericano, el europeo sólo demanda cerca de 21.000. En Japón los coches Lexus se venden bajo la marca Toyota.
Escudero reconoce que la marca es poco conocida en España y genera la mayor parte de sus ventas 'boca a boca'. Otro obstáculo para crecer es la falta de motores diésel, que podrían llegar en unos años.
El director general de Lexus alerta de los efectos de la 'guerra tremenda de descuentos' entre los fabricantes. 'Ya estamos cerca del límite' en este terreno, dice. En su opinión, en 2003 el mercado generalista seguirá bajando y el de lujo se mantendrá. Lexus vende sus vehículos, todos importados de Japón, entre 26.000 y 85.000 euros.