Pequeño y gran comercio extreman sus posturas ante la libertad de horarios
Los hipermercados (partidarios de abrir el mayor número posible de festivos), los supermercados, el pequeño comercio, las asociaciones de consumidores y los sindicatos han puesto en marcha durante los últimos días intensas campañas de concienciación para conseguir influir en la ampliación o reducción de la liberalización de horarios comerciales.
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid decidirá hoy sobre el número de festivos en que se permitirá la apertura y ante esta fecha límite, los diferentes colectivos afectados han intensificado sus manifestaciones en favor o en contra. En la actualidad se permite abrir 19 domingos al año, pero en el último proyecto de decreto elaborado por la Comunidad de Madrid este número se ampliaba a 26. Tras una serie de reuniones entre las partes implicadas y un intenso debate, patronales, sindicatos y administración no han logrado ponerse de acuerdo.
La patronal de las grandes superficies, Anged, insistió ayer en rueda de prensa en una liberalización de horarios para competir 'en igualdad de condiciones' con los supermercados. 'Queremos dar respuesta a la demanda de 2,3 millones de consumidores diarios que acuden a nuestros centros y que también quieren comprar en domingo', señaló Javier Millán Astray, director general de Anged.
El pequeño comercio, en cambio, ofreció ayer (sólo una hora y media antes) otros datos diferentes. 'Casi el 86% de los españoles se muestra poco o nada perjudicado con el actual calendario actual de aperturas, según el último informe del CIS', señaló Hilario Alfaro, portavoz de Cecoma, la patronal del pequeño y mediano comercio de la Comunidad de Madrid que agrupa a 109 organizaciones empresariales y unos 40.000 puntos de venta.
Modelo de sociedad
Y es que las necesidades de los consumidores y el 'modelo de sociedad' que se pretende conseguir con estas medidas, es uno de los argumentos que han esgrimido las partes implicadas. Mientras Cecoma, Asedas (la patronal de los supermercados) y los sindicatos apuestan por mantener el status quo y acusan a Anged de querer alterar el modelo actual, los híper señalan que 'sólo pretendemos dar respuesta al cambio que está sufriendo la sociedad española'.
El posible encarecimiento de los productos a consecuencia de una liberalización es una de las armas que ha arrojado el pequeño y mediano comercio junto a los sindicatos para intentar reducir las aperturas dominicales. 'La apertura en festivos supone un aumento de los costes estructurales y por tanto un aumento de precios al reducirse los márgenes estructurales'.
Anged contesta diciendo que 'si eso fuera cierto, Asedas debería estar encantada porque con un precio más alto nos estrellaríamos'. 'El incremento o descenso de precios está en función de la competencia', añade Millán Astray.
Tampoco en el empleo hay homogeneidad de datos: mientras Asedas cifra entre 56.000 y 59.000 los puestos de trabajo que se perderían en el caso de que se produjera una liberalización total, Anged se compromete a crear 30.000 empleos (sólo 8.000 si se ampliara a 26 el número de aperturas dominicales).
En cuanto a la variación de cuota de mercado por formatos, la patronal de las grandes superficies asegura (cita datos Nielsen, al igual que Asedas) que entre 1995 y 2001 los híper han perdido un 16% de cuota, mientras que los súper han ganado un 30%. Los supermercados consideran que los híper han crecido un 25% frente al 14% que han registrado ellos.