Los supermercados aseguran que la libertad horaria elevará los precios
Ni supermercados ni pequeño comercio cejan en su batalla contra la libertad de horarios comerciales y la apertura en domingos que pretende implantar la Comunidad de Madrid para 2003. La patronal de los supermercados (Asedas) presentó ayer un informe según el cual 'la liberalización de horarios comerciales, con la apertura de todos los domingos y festivos del año, acarrearía enormes consecuencias sociales'. Y cifra entre 56.000 y 59.000 los empleos que se perderían si materializara esta liberalización.
Asedas también asegura que esta medida supondría una importante elevación de los precios de cara al consumidor final, ya que se produciría un incremento de los costes laborales que necesariamente deberían repercutirse en los clientes. En esta misma tesis se manifestó la Confederación de Empresarios de Comercio Minorista, Autónomos y de Servicios de la Comunidad de Madrid (Cecoma). 'Pagar por trabajar en domingo es más caro que lo que se paga por trabajar entre semana, por lo que los costes laborales aumentan y por tanto los precios. Todo ello acelerará el proceso de convergencia con los precios europeos en alimentación, mucho más altos que los europeos', explica la patronal del pequeño comercio.
Tanto Asedas como Cecoma coinciden en que esta liberalización sólo beneficiaría a los híper, que sólo buscan aumentar su cuota de mercado. 'Nosotros creemos que el supermercado ayuda al comercio de proximidad a mantenerse y a ser más competitivo', señaló el director general de Asedas, Andoni Monforte.
El responsable de esta patronal acusó 'a las dos grandes multinacionales francesas de la distribución Carrefour y Alcampo' de ser las únicas que impulsan esta liberalización, mientras que Salvador Santos Campano, presidente de Cecoma, argumenta que 'es una incongruencia que las compañías matrices de los grupos franceses que están actuando en España no estén ejerciendo presión para liberalizar los horarios en su país'.
Respecto al aumento de precios de alimentación que se ha registrado a lo largo del año, Monforte lo atribuyó a la existencia de 'ineficacias' en la cadena de distribución y culpó a los intermediarios de estas alzas. En el comparativo interanual de octubre de 2001 a octubre de este año, el aumento medio de precios de los híper ha sido del 5,4%, mientras que en los súper de 400 a 999 metros cuadrados ha sido del 4% y en los de 1.000 a 2.500 metros se ha aumentado un 3,1%.
En el informe de Asedas se señala que España es el país de la UE donde más barata resulta la cesta de la compra y puntualiza que 'la alimentación no está siendo el sector más determinante en el aumento de la inflación'. También añade que en España es donde existe 'la legislación europea de horarios comerciales y aperturas que permite mayor servicio al consumidor'.
En cuanto a la evolución por formatos en el sector de la distribución alimenticia, Asedas acude a datos de AC Nielsen para explicar que los de mayor crecimiento son las tiendas de descuento y los híper, que desde 1996 han aumentado un 42% y un 25%, respectivamente. Los supermercados han crecido en los últimos cinco años un 14%, mientras que el comercio tradicional y los autoservicios han perdido un 35% de sus establecimientos.
En el caso de Madrid, añade que 'tiene una infradotación de establecimientos minoristas y de superficie de metros cuadrados'.