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Coyuntura

La mayoría de los sectores cree que 2003 será peor si no hay recuperación exterior

Para la mayoría de las empresas, 2003 será aún peor que este año, en cuanto a su nivel de producción, si no hay una clara recuperación de las grandes potencias internacionales. Sólo los sectores fuertemente dependientes de la demanda interna, como construcción, química o la gran distribución, mantienen expectativas claramente optimistas.

Uno de los aspectos destacados por todas las asociaciones empresariales consultadas es la existencia de numerosas incertidumbres, lo que impide, en no pocos casos, concretar en qué momento del próximo año se producirá la ansiada recuperación y cuál será su fortaleza. De hecho, muchas de las estimaciones ahora esgrimidas han ido cambiando según se desvanecía la posibilidad de que la coyuntura internacional se recuperara este segundo semestre.

Las cúpulas empresariales son las primeras pesimistas. En la CEOE se opina que lo más probable es que la recuperación económica no llegue de forma clara hasta principios de 2004, lo que agrava la incertidumbre acerca del comportamiento de los sectores en 2003.

Por su parte, los técnicos de la patronal de las pequeñas y medianas empresas (Cepyme) se muestran seguros de que las previsiones de crecimiento y empleo hechas por el Gobierno 'no se van a cumplir porque la tónica de desaceleración es aún persistente y esto se debe, sobre todo, al sector exterior'.

Precisamente, los empresarios que peor ven la marcha de la economía en 2003 son aquellos cuya actividad depende mayormente del sector exterior. Fuentes de la patronal de la industria del metal (Confemetal) señalan que el sector 'apunta a una leve caída en todos los indicadores de producción, por los pocos síntomas de recuperación de la economía internacional'. En cuanto a la inversión, la situación es 'de estancamiento y sin signos de recuperación claros', según Confemetal. Sólo la reciente bajada de tipos de interés podría impulsar la actividad.

Otro sector clave que mantiene su pesimismo para el próximo ejercicio es el de los fabricantes de bienes de equipo. Hace un año, por estas fechas, el 75% de los empresarios del sector pensaba que en 2002 empeoraría la actividad de sus empresas. En la actualidad, según el informe Consenso Económico, elaborado por PricewaterhouseCoopers, este porcentaje de pesimistas se eleva al 78% de los fabricantes de bienes de equipo de cara a 2003.

No sólo el entorno exterior ensombrece las perspectivas de crecimiento. En el caso de las telecomunicaciones, son las decisiones del Gobierno las que cuestionan su recuperación. Esto es lo que opina, Juan Gascón, subdirector de la patronal de las industrias electrónicas y de telecomunicaciones (Aniel), para quien sólo si el Ejecutivo saca adelante la nueva Ley General de las Telecomunicaciones adaptada a las directivas comunitarias e impulsa el plan de inversiones Info XXI podrá recuperarse el sector en 2003. De lo contrario, si el Ejecutivo no adopta estas dos decisiones, el próximo ejercicio podría ser aún peor que el presente, en el que, por ejemplo, la producción del área de los fabricantes se cerrará con una caída del 35% y se registrará una destrucción de empleo del 5% en el sector. Nada que ver con el moderado optimismo de la mayoría de las áreas del sector servicios o las grandes expectativas que mantiene la construcción un año más. Fuentes de la patronal de las grandes empresas de distribución (Anged) prevén, como mínimo, un crecimiento de la actividad de entre el 1,5% y el 2%, y unas inversiones de 1.800 millones.

También optimista, la patronal de la industria química (Feique) prevé duplicar la producción hasta el 4%, aumentar la inversión un 11% y el empleo, un 1,1%.

Y un año más, la construcción baraja superar 2003 con tranquilidad, ya que, pese a la desaceleración prevista en la actividad residencial, la obra civil permitirá mantener un nivel de producción ostensiblemente superior al incremento previsto para el PIB (un 3%, según el cuadro macro del Gobierno) y una creación de empleo del 5%.

El empleo no peligra, pero tampoco recuperará el vigor pasado

La mayoría de los sectores económicos no planea destruir empleo en 2003, salvo la agricultura y algunas ramas de la energía.Bien es verdad que la tónica generalizada entre los empresarios es que el empleo se estanque o crezca más bien poco en el próximo ejercicio, con lo que tampoco terminará de recuperarse y recobrar las tasas anteriores a la desaceleración económica que se inició a finales del año 2000. Los empresarios de los sectores de la construcción y los servicios vuelven a ser los más optimistas en materia de empleo para el año próximo. En ambos sectores se prevé una creación de empleo mayor que las estimaciones del Gobierno para el conjunto de la economía. El cuadro macroeconómico calcula la generación de 282.000 puestos de trabajo en 2003, lo que supone un avance del empleo del 1,8%. En el caso de la construcción, las estimaciones se elevan hasta el 5%, y en los servicios hasta el en torno del 2%, según las fuentes consultadas. Un claro ejemplo de este último sector es el de la patronal de las grandes empresas de distribución (Anged). Fuentes de esta organización prevén la creación de 17.250 empleos, lo que representa un crecimiento de entre el 1,5% y el 2%. No obstante, se trata de un planteamiento de mínimos que podría incrementarse en la segunda mitad del año. En el caso intermedio se sitúan los sectores de la industria y la química, que estiman un estancamiento del empleo, creando los mismos puestos que este año o incluso una leve caída. La Asociación de Fabricantes de Automóviles y Camiones y la patronal de autopistas coinciden en que el empleo se mantendrá estable el año próximo, aunque en el segundo de los casos es posible un pequeño repunte debido a la apertura prevista de nuevos tramos de peajes. Por su parte, el sector de automoción lleva años con creación de empleo estable, ya que suele recurrir a expedientes temporales de regulación.

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