Lula nombra titular del Banco Central a un diputado opositor
Uno de los principales retos del nuevo jefe del Banco Central será el de lidiar con el imparable crecimiento de la inflación. El equipo de transición designado por el presidente electo, el líder del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inácio Lula da Silva, decidió ayer fijar la meta de inflación para 2003 en el 6,5%. El objetivo, que contempla una banda de dos puntos porcentuales por encima y por debajo, es ambicioso, se espera que el crecimiento del IPC se sitúe este año en las dos décimas.
Meirelles, ingeniero de 57 años, fue elegido diputado en las pasadas elecciones de octubre. El cargo ya le había sido ofrecido, pero hasta ahora se había mostrado reacio, ya que está obligado a renunciar a su escaño. Por otra parte, Meirelles no oculta sus aspiraciones a lograr, bajo la bandera del PSDB, un cargo en el Gobierno en las elecciones de 2006. Sin embargo, Meirelles afirmó al ser elegido: ¢Puedo renunciar y desligarme del PSDB¢.
El presidente de la Bolsa de Valores de São Paulo (Bovespa), Raymundo Magliano, afirmó ayer que la elección de Meirelles llevará ¢tranquilidad¢ al mercado financiero nacional e internacional, porque es un nombre de ¢gran credibilidad¢. La reacción en la Bolsa fue tibia, ya que el índice selectivo de Bovespa fluctuó entre las pérdidas y ganancias, para cerrar finalmente con una caída del 0,25%. El índice acumula pérdidas cercanas al 22% en el año. La reacción del real tampoco fue positiva. La moneda retrocedió un 0,39% y el dólar cotizó a 3,79 reales.
En lo que va de año, la moneda brasileña se ha depreciado cerca de un 40% respecto al dólar. La depreciación ha tenido más efectos negativos que positivos. Aunque ha ayudado a que las exportaciones brasileñas ganen competitividad, lo cierto es que ha multiplicado los efectos inflacionarios, ya que gran parte de los bienes intermedios que importa la industria brasileña proceden de EE UU.
El crecimiento de la inflación ha obligado al Banco Central, hasta ahora dirigido por Armínio Fraga, a aplicar una subida meteórica de los tipos de interés hasta llevarlos en poco menos de dos años del 15% al 22%.
Por otra parte, buena parte de la deuda pública brasileña está vinculada al tipo de cambio, lo que ha complicado el pago de las obligaciones. Precisamente, las dudas de los inversores internacionales so-bre la capacidad de Brasil para hacer frente a la carga de deuda han llevado al índice riesgo-país, que mide la percepción de riesgo de impago, al entorno de los 1.600 puntos básicos, frente a los 800 puntos de comienzos de año. En la práctica, esto significa que el interés al que se ofrecen los bonos brasileños supera en 16 puntos porcentuales a los del tesoro estadounidense.
Con el nombramiento de Meirelles, queda configurado el eje del equipo económico que empezará a funcionar el 1 de enero. El jefe del equipo de transición, Antonio Palocci, será el ministro de Hacienda. Por otra parte, Lula confirmó ayer a José Dirceu, presidente del PT, como ministro de la presidencia.