Los Quince adaptan las instituciones para 25 miembros
El proceso de ampliación de la UE se ha centrado hasta ahora en evaluar el grado de preparación de los 10 candidatos que se incorporarán el 1 de mayo de 2004. Pero se ha obviado, según el Centro para la Reforma de Europa, un instituto independiente con sede en Londres, que son las propias instituciones comunitarias las que no se encuentran preparadas para trabajar con 25 Estados miembros.
Los presidentes de Gobierno de los 15 Estados miembros actuales estudiarán hoy, durante un almuerzo de trabajo, la futura organización de las presidencias de la UE, hasta ahora ostentadas por un país diferente cada semestre. Sobre la mesa figura la opción de una coordinación más intensa entre las sucesivas presidencias o la formación de equipos rotatorios por países que ostenten la presidencia durante periodos más largos.
Ninguna de estas propuestas es incompatible con la creación de la figura del presidente de la UE, como propugnan España, Francia y Reino Unido. Esta posibilidad, sin embargo, cuenta con el rechazo absoluto de la Comisión Europea y de los países pequeños de la UE.
Constitución
El engranaje actual puede seguir funcionando de momento gracias a la reforma introducida por Javier Solana. El secretario general de la UE ha logrado que los Consejos Europeos concentren sus sesiones en temas de verdadero calado político, eliminando de la agenda los aspectos técnicos que puedan ser resueltos en las reuniones ministeriales. Otras reformas más profundas deberán esperar al menos hasta 2004, cuando la UE contará con su primera constitución.
El presidente de la convención que elabora ese texto, Valéry Giscard d'Estaing, informó ayer a los líderes europeos sobre la evolución del foro constitucional. Los primeros ministros dedicaron hora y media al encuentro con el antiguo presidente de la República Francesa, 'señal clara', según fuentes de la presidencia danesa, 'de la importancia que conceden al trabajo de la convención'.