La empresa de derribos Stone Work monta una planta de biomasa en León
Stone Work apenas tenía cuatro años de vida en el negocio de las demoliciones y la gestión selectiva de los residuos de construcción cuando, en 2000, decidió poner sus miras en la generación eléctrica a partir de residuos de gallinaza. Creó entonces una división de energía y medio ambiente, con sede en Madrid. Su director, Adolfo Núñez, explica así esta curiosa evolución del negocio: 'La mayoría de los profesionales que trabajamos aquí (40 en total) procedemos de Sinae y Abengoa'.
Núñez afirma, además, que 'nuestra experiencia con los proyectos de plantas de tratamiento de purines nos ayuda a no cometer los mismos errores'.
El resultado de esta experiencia se tradujo en su asociación con la constructora vallisoletana Rincava Gestión para constituir Energías Renovables de La Robla (Errsa), que construirá en este municipio leonés la primera planta de biomasa de España que utilizará la gallinaza como combustible. La pionera de Europa es la británica Fibrowatt, que cuenta con cuatro plantas para reciclar la gallinaza.
El sector avícola supone el 10% de la producción ganadera en España. Los residuos de 668 millones de pollos contaminan los suelos, por su elevada concentración en nitratos y fosfatos.
Con una capacidad de tratamiento de 60.000 toneladas de gallinaza y una potencia instalada de 5,3 megavatios, la planta de La Robla prevé su entrada en funcionamiento 'a mediados de 2004', según Adolfo Núñez. En conjunto, supone una inversión de 9,6 millones de euros, 'el doble de lo que costaría construir una central similar convencional de ciclo combinado', puntualiza. Consiguieron subvenciones del Ministerio de Industria y de fondos europeos Feoaga por valor de 2,7 millones de euros, pero el director de medio ambiente de Stone Work asegura que encontrar financiación para estos proyectos es muy complicado, 'porque los bancos los consideran muy pequeños y no existe un marco legal suficientemente definido para las energías renovables como en Alemania'.
Para salvar estas dificultades, Núñez asegura que mantienen negociaciones con Iberdrola para construir plantas similares a la de La Robla en otro municipio cercano, Villablino, y en Sevilla. 'Quiere el 51% del capital', afirma.