El 50% de los despidos en Fiat pueden ser definitivos
Los sindicatos italianos rechazaron ayer el plan de reestructuración del grupo industrial Fiat al considerar que no garantiza los puestos de trabajo ni la continuidad de la empresa.
Esta negativa hizo fracasar la mediación del Gobierno italiano, que ayer reunió en la sede romana del Ejecutivo, bajo la presidencia del ministro de Trabajo, Roberto Maroni, a los líderes de las grandes centrales sindicales y al consejero delegado de Fiat Auto, Giancarlo Boschetti.
Boschetti anunció en la reunión que sólo la mitad de los 8.100 trabajadores de Fiat que, según el plan, pasarán al fondo de desempleo podrán regresar a sus puestos de trabajo. El retorno del resto dependerá de cómo vaya el mercado automovilístico.
Como contrapartida a ese sacrificio de los trabajadores, Fiat garantizó que las inversiones en el sector aumentarán de 2,5 a 2,6 millones de euros al año entre los años 2003 y 2005, y que la producción no disminuirá.
Según el grupo turinés, con esas medidas ahorrará 1.000 millones de euros (otros tantos dólares).