SIMO reúne a 50 empresas menos que en 2001 por la crisis tecnológica
SIMO, la feria internacional de la informática, el multimedia y las comunicaciones, inauguró ayer su 42º edición con 800 expositores, 50 menos que el año pasado. Las ausencias, consecuencia directa de la crisis que atraviesa el sector, se hacen más evidentes, ya que, pese a todo, la feria ha aumentado su superficie (62.000 metros cuadrados frente a los 60.300 del año anterior), por lo que los pabellones se ven mucho más vacíos, y las exposiciones, más holgadas.
A pesar de contar con menos empresas expositoras, la organización espera una afluencia de público de 275.000 personas, cifra que superaría los 260.000 visitantes del año pasado. Así, el espíritu de este año trata de no analizar la crisis, sino superarla mirando hacia delante con nuevas propuestas tecnológicas.
'Una fiesta de la tecnología y de la vanguardia', tal y como la definió Alberto Ruiz-Gallardón, el presidente de la Comunidad de Madrid, que un año más dio el tijeretazo de inauguración de la feria. Gallardón aprovechó para felicitar a los empresarios 'que no se han cerrado en el corto plazo y han seguido invirtiendo'. José María Álvarez del Manzano, alcalde de Madrid, y Fernando Fernández Tapias, presidente de la Cámara de Comercio e Industria, estuvieron presentes en el acto y posteriormente recorrieron la feria.
Ninguno de ellos debió pasar por alto la invasión de dispositivos y sistemas inalámbricos que se han hecho con el protagonismo de esta edición. 'En el año 2005, el uso de tecnologías sin cables se multiplicará por 25', según explicaba Xavier Pascual, director general de Toshiba España, compañía que presentó su nuevo sistema de acceso inalámbrico a Internet.
En las distintas exposiciones se pudo comprobar que los ordenadores de bolsillo van ganando cada vez más prestaciones para interconectarse con otros aparatos, mientras que los teléfonos móviles van ganando capacidad de proceso, lo que hace prever una convergencia a la larga de estos dos tipos de dispositivos, según defiende Pascual.
La convivencia entre estos dos tipos de equipos y cuál de ellos será el preponderante en el futuro centró uno de los debates más interesantes de ayer en el congreso dedicado a tecnologías móviles, eMobility, que se celebra paralelamente a SIMO.
Pero las posibilidades de las redes inalámbricas no se paran en las agendas electrónicas. Sus aplicaciones pueden trasladarse a todos los ámbitos de la vida cotidiana. Responsables del Museo Guggenheim de Bilbao, invitados a la cita para relatar sus experiencias, contaron cómo se están usando estas redes para que sus ejecutivos puedan acceder a distintas aplicaciones. El museo prepara un sistema audiovisual de visitas para que cualquiera que entre al recinto se conecte a una red sin necesidad de cables para conocer algo más sobre una obra o descargarse un vídeo.
3Com mostró la aplicación de las redes inalámbricas en Chrysler Grand Voyager, que con una pantalla en los asientos traseros permite descargar las canciones que quieren escuchar en el viaje o una película que sólo seguirían los pasajeros de atrás gracias a unos auriculares inalámbricos.
'Podemos trasladar el acceso a la información a cualquier lugar', comenta Amador Melero, consejero delegado de Awa, distribuidor de 3Com, que ha llevado el acceso a Internet gracias a la tecnología inalámbrica (Wi-Fi) a más de 200 usuarios del Penedés catalán, servicio que hasta ahora ninguna compañía telefónica facilitaba en esta zona.
El otro gran protagonista de la feria es el Tablet PC, que Microsoft presenta oficialmente el próximo jueves, día 7, en todo el mundo. Los principales fabricantes de ordenadores, con algunas excepciones como IBM, exhiben sus primeros modelos que salen al mercado con un precio que ronda los 3.000 euros. 'Es un equipo dirigido a profesionales que tienen que coger datos en el terreno, como los peritos y los médicos', apuntan en el stand de Fujitsu Siemens. Estos equipos se harán más asequibles según su aceptación.
Gallardón insta a no perder el tren tecnológico
'Si no seguimos el camino de la innovación y de la aplicación de las investigaciones, perderemos un tren que no seremos capaces de recuperar', aseguraba Alberto Ruiz-Gallardón en el discurso de apertura de SIMO 2002, feria a la que asiste desde hace siete años. Según dijo el presidente madrileño, desde que llegó a su puesto es un convencido de la relevancia de las tecnologías para mejorar la calidad de vida. 'La convergencia de la voz, la imagen y los datos no sólo mejoran la economía y nuestra capacidad de competir, también la vida cotidiana', opinó el nuevo candidato a la Alcaldía de Madrid, a quien le gustó destacar de la ciudad su papel como motor del sector informático. Madrid alberga al 41% de las sedes de las empresas tecnológicas. Según el Centro de Predicción Económica, es la comunidad más avanzada de España en la penetración de la nueva economía con un índice de 155 sobre una media de 100. Gallardón señaló que buena parte del desarrolló económico de Madrid se ha debido 'a una especial dedicación a las actividades relacionadas con las nuevas tecnologías y a su mayor grado de uso en todos los sectores económicos'.