Cajasur garantiza a su presidente y a sus hermanas un elevado seguro vitalicio
El presidente de Cajasur, el sacerdote Miguel Castillejo, de 73 años, tiene blindada su salida de la entidad con un seguro millonario que le cubre a él y a sus cuatro hermanas. En septiembre de 2001, la entidad suscribió una póliza de seguro de vida, modalidad de renta, con la aseguradora Caser cuya prima asciende a 2,9 millones de euros (484 millones de pesetas) y de la que son beneficiarios Castillejo y estos familiares. Cuando deje la entidad, Castillejo cobrará una pensión vitalicia equivalente a la remuneración anual del director general de la caja (unos 210.000 euros en 2001) más 3.005 euros.
La mitad de esta pensión anual, que se revisará conforme al sueldo que cobre el director general de la caja en el momento de la salida de Castillejo, la heredarán, en caso de fallecimiento del sacerdote, sucesivamente y de mayor a menor, sus cuatro hermanas, hasta que fallezca la última.
Castillejo, presidente de Cajasur desde hace 25 años, se mantiene al frente de la entidad gracias a que el Gobierno del PP recurrió ante el Tribunal Constitucional la Ley de Cajas andaluza, que fija en 70 años la edad de jubilación. El Gobierno andaluz pretendía que Cajasur, controlada por la Iglesia católica, se rigiese por los mismos criterios que las otras cinco cajas de ahorro andaluzas, principalmente en la composición de sus órganos de dirección.
Además de lograr que el Gobierno recurriese la ley andaluza, Castillejo ha visto garantizada la singularidad de Cajasur con una enmienda del PP a la Ley Financiera por la que se despoja a las comunidades autónomas de varias competencias sobre las entidades fundadas por la Iglesia católica.
Pese a que Castillejo ha reiterado en infinidad de ocasiones su intención de mantenerse al frente de la caja, la entidad ya ha blindado su futuro: el 21 de septiembre de 2001, la caja suscribió un seguro de vida con Caser, aseguradora de 36 cajas de ahorro (entre ellas Cajasur), en el que figuran como beneficiarios Castillejo y sus cuatro hermanas. Una decisión que, según la entidad, se basa en un acuerdo del consejo de administración del 4 de mayo de ese año, aunque fuentes de dicho consejo niegan que se formulara en esos términos. Algunos consejeros pidieron a Cajasur, sin éxito, el acta de esa reunión.
La entidad pagó por este seguro una prima única de 2.908.796 millones de euros (484 millones de pesetas), una cantidad equivalente al 6% del beneficio neto de la matriz cordobesa en 2001 y al 15% de su obra social, según fuentes de la entidad. Como contraprestación, Caser garantiza a Castillejo el pago vitalicio de una renta anual cuando abandone, por voluntad propia o cese, la presidencia de la caja. 'El importe de la renta anual que recibirá el asegurado mientras viva será al menos la retribución bruta total que corresponda por el año 2001 al director general (210.000 euros) por todos los conceptos incrementada en 3.005 euros. Este importe será minorado en su caso con la prestación pública por jubilación que perciba el asegurado', reza el documento.
La póliza especifica que 'para que el asegurado pueda cobrar la renta inmediata deberá haber cesado, a iniciativa propia o de la entidad en el cargo de presidente ejecutivo de Cajasur'. En caso de fallecimiento del asegurado 'la renta anual será percibida por los beneficiarios determinados en la cláusula cuarta', esto es, las cuatro hermanas de Castillejo, nacidas entre 1925 y 1936. Las hermanas Purificación, Carmen, Dolores y Joaquina heredarán la mitad de esta renta, también con carácter vitalicio. Un informe de la subdirección de Recursos Humanos de Cajasur precisa que en caso de que Castillejo fallezca, cobrará la renta 'la hermana de mayor edad que le sobreviva, y al fallecimiento de ésta, la siguiente de mayor edad y así sucesivamente hasta el fallecimiento de la última'.
Cajasur confirmó ayer la existencia de la póliza e informó de que ésta se suscribió en una época en la que la entidad externalizó otros 2.200 fondos de pensiones de trabajadores de la caja. Recursos Humanos argumentaba que la renta para Castillejo es 'una retribución diferida, adicional' a la que ya percibe.
Una fuente de la caja que ha estudiado el tema estima que no se trata de una 'retribución diferida, que iría vinculada al desempeño del cargo y finalizaría en el momento del cese', sino de una 'indemnización'. En ese caso, según la Junta, se puede haber producido una 'contravención' a la Ley andaluza de Cajas, que en su artículo 50.2 establece que los presidentes ejecutivos no pueden cobrar indemnizaciones al cesar en su cargo, por no tener 'vinculación laboral' con la caja. Otro experto jurídico cree que puede haber 'fraude de ley'. La Junta, que inició a principios de octubre una inspección en la entidad, es competente en este asunto, según una fuente del Banco de España.