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La enoteca

El otro Levante

Una comarca vinícola con clara vocación exportadora que ha logrado una merecida fama con sus vinos rosados y que comienza a despuntar con interesantes tintos

La Denominación de Origen Utiel-Requena se sitúa en el extremo occidental de la provincia de Valencia, ya lindante con la comunidad de Castilla-La Mancha, y engloba los municipios de Camporrobles, Caudete de Las Fuentes, Fuenterrobles, Requena, Siete Aguas, Sinarcas, Utiel, Venta del Moro y Villargordo del Cabriel. La zona goza de un carácter propio, ya que se trata de la única comarca vinícola valenciana que se asienta sobre una llanura, en contraste con el carácter montañoso de las denominaciones vecinas. Su altitud (800 metros) y alejamiento del mar influyen directamente sobre el clima, presentando rasgos de continentalidad que no encontramos en otras zonas de Valencia. El clima se caracteriza por su sequedad y sus fuertes oscilaciones térmicas. Las lluvias llegan en otoño y primavera, acompañadas en esta estación de riesgos de heladas, mientras que en verano son frecuentes las granizadas. Todo ello hace que el cultivo del viñedo conlleve notables riesgos. Sin embargo, la vid ha formado parte del paisaje de estas tierras desde tiempos inmemoriales. Cuando entre 1852 y 1862 la enfermedad del oídio arrasó el viñedo francés, el país galo comenzó a importar grandes cantidades de vinos de esta comarca. La apertura del ferrocarril Valencia-Utiel en 1885 terminó con los problemas de transporte y consolidó el flujo vinícola desde las bodegas hasta el puerto de Valencia. Se abría así una etapa con vocación exportadora para los bodegueros de la región.

A comienzos del siglo XX, la devastadora plaga de la filoxera comenzó a destruir los viñedos de estos municipios, sin embargo, la fuerte resistencia de la variedad autóctona bobal, protagonista absoluta en las plantaciones de estas tierras, sirvió de freno a la plaga y permitió a los viticultores ir sustituyendo lentamente los pies europeos por los americanos sin que llegase a apreciarse una disminución en la superficie vitícola.

Actualmente, el viñedo cubre 40.000 hectáreas. Las variedades tintas son bobal, tempranillo, garnacha, cabernet sauvignon y merlot. La bobal es la más extendida, se adapta perfectamente a las características edafológicas y climatológicas de la zona, ya que muestra clara preferencia por las tierras altas, con veranos cortos y secos, en los que desarrolla bien sus caracteres típicos. Se usa principalmente para la obtención de rosados, de gran frescor, afrutados y con resistencia a la oxidación. Tempranillo, garnacha y la bobal son idóneas para la obtención de tintos que han de dar lugar a vinos de crianza, reserva y gran reserva. La incorporación de cabernet sauvignon y merlot, sobre todo la primera, en unión a la tempranillo, da excelentes tintos aptos para recibir largas crianzas en roble. En cuanto a las blancas, las autorizadas por el Consejo Regulador de la DO Utiel-Requena son macabeo, merseguera, chardonnay y la autóctona planta nova o tardana. Con la macabeo se elaboran vinos blancos de intensos aromas y sabores frutales. La uva autóctona planta nova o tardana proporciona, a su vez, vinos equilibrados en boca con un punto de acidez. Es importante destacar la finura que aporta la internacional chardonnay en su unión a estas dos variedades. La merseguera no es de cultivo muy extendido y actualmente sólo se puede encontrar en los viñedos plantados a mayor altitud. Por último, hay que destacar la elaboración en esta comarca de espumosos acogidos a la DO Cava. Dentro de éstos encontramos dos tipos: los blancos, conseguidos a partir de macabeo y planta nova, y el rosado, a partir de la variedad bobal. Ambos presentan una graduación alcohólica entre 11 y 11,5 grados, fina burbuja y aromas frutales que recuerdan a las variedades de los que proceden.

Los Claustros de Torre Oria. Tinto Crianza 1999

Cavas y Vinos Torre Oria, fundada en 1897, pertenece actualmente a Natra, que ha logrado diversos premios para sus vinos en los últimos años. Los Claustros de Torre Oria Crianza 1999 presenta un color rojo granate oscuro con tonos ligeramente amarronados en el ribete. Aromas complejos de buena intensidad con un fondo de fruta madura, finos toques tostados y especiados con buena persistencia. En boca es fresco al ataque, seco, con buena acidez, tanino noble, pulido, buenas sensaciones frutales y un retrogusto largo en el que aparecen los tonos especiados apreciados en la fase olfativa. Acompáñelo con guisos de aves, como el pichón estofado. Bodega: Cavas y Vinos Torre Oria. Crianza: 14 meses en barrica de roble. Variedades: cabernet sauvignon, merlot, tempranillo y bobal. Cosecha: muy buena. Temperatura de servicio: 18º C. Precio aproximado en bodega: 5,90 euros.

Ceremonia Tinto Crianza 1998

El vino presenta en cata un precioso color rojo cereza picota madura con ribete granate intenso. En nariz se muestra concentrado y maduro con notas de frutos rojos en confitura -guindas y fresas-, recuerdos lácticos y más tarde despliega ecos balsámicos -regaliz negro- y especiados. En boca es sabroso, carnoso y equilibrado, taninos maduros, frutales y potentes que le dotan de un paso de boca amplio, muy frutal y con volumen. Gran carga frutal. Larga persistencia final con recuerdos especiados y tostados. Puro carácter mediterráneo. Maridará perfectamente con legumbres estofadas con caza, judías rojas estofadas con liebre o con carnes rojas a la parrilla como el chuletón de buey. Bodega: Vicente Gandía Pla. Crianza: 12 meses en barricas de roble americano. Variedades: tempranillo y cabernet sauvignon. Cosecha: muy buena. Temperatura de servicio: 16-17º C. Precio: 16 euros.

Coronilla Tinto Crianza 2000

Bodegas Murviedro fue fundada en 1927 como la filial española de la suiza Schenk, una de las principales compañías europeas del vino. Coronilla Crianza 2000 es un monovarietal, que conviene decantar al menos una hora antes de su servicio. Color rojo picota de capa alta con ribete amoratado. Aromas frutosos y especiados de buena intensidad, con tonos de maderas muy bien ligadas, recuerdos ahumados y tostados; muy buena persistencia. En boca es amplio, muy frutal, tanino carnoso, con un buen despliegue de sabores y un retrogusto especiado donde vuelven a salir los agradables recuerdos balsámicos, tostados y ahumados procedentes de su crianza. Acompañar con legumbres, como unas lentejas de la Armuña.Bodega: Bodegas Schenk (Murviedro). Crianza: 8 meses en barricas nuevas de roble francés Allier. Variedades: bobal. Cosecha: muy buena. Temperatura de servicio: 17º C. Precio: 8 euros.

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