Los técnicos de Iberia se inclinan por el 777 de Boeing para renovar la flota
La decisión de Iberia está a punto de caer y en el peor de los casos se adoptará antes de fin de año. La aerolínea se enfrenta a una disyuntiva delicada: la elección del tipo de avión sobre el que descansará la operación de sus principales rutas intercontinentales, entre las que destacan las conexiones con Estados Unidos, México y Argentina.
El pedido consistirá en la compra de 10 aviones, con las opciones correspondientes, por una inversión estimada de 1.200 millones de euros. Los tres modelos de avión sobre los que elegirá la empresa son el birreactor Boeing 777-200 y los cuatrirreactores Airbus 340-600 y Boeing 747-400 (conocido como Jumbo).
Los estudios realizados por los técnicos de la aerolínea de bandera española y presentados a la dirección de cara a la recta final del proceso de selección ofrecen una ligera puntuación en favor del más moderno de los aviones del gigante norteamericano Boeing: el 777-200, frente al aparato de Airbus, el 340-600. Entre tanto, la última versión del mítico Jumbo queda prácticamente descartada.
Los informes de los técnicos estiman que el B 777-200 gana a su competidor europeo en su relación entre la potencia de sus motores y su peso, lo que permite ofrecer un mejor comportamiento en cuanto a consumo de combustible. Desde el punto de vista técnico y operativo, no obstante, el avión de Boeing cuenta con la desventaja de que no podrá despegar a plena carga en algunos aeropuertos de Latinoamérica donde Iberia tiene importantes intereses, tales como Ciudad de México y Bogotá.
Existe un segundo argumento operativo que favorece los intereses de Boeing en esta carrera: las fechas de entrega. Fuentes cercanas a Iberia han apuntado que el buen comportamiento del mercado de conexión aérea entre Europa y América Latina, sumado a los ajustes de capacidad que Iberia hizo a raíz de los atentados de Nueva York de hace un año, dan como resultado un significativo déficit en la oferta de la compañía para estas rutas. Tanto los aviones nuevos del modelo B 777 como los del A 340 tienen un plazo de entrega en 2004 y 2005. El fabricante estadounidense, sin embargo, ha ofrecido a Iberia la opción de alquilarle los aparatos Jumbo 747-400 que necesite durante el periodo transitorio, hasta que pudiera entregar el pedido de los aparatos B 777.
Los informes de los técnicos en favor de Boeing se ven compensados por la opinión en favor de las opciones del Airbus 340-600 de los financieros de la compañía. En esta área de la empresa se considera prácticamente imposible que el fabricante norteamericano pueda realizar una oferta económica que compense los ahorros de costes que se derivan del hecho de que Iberia haya realizado la renovación de su flota de corto y medio radio con aviones de Airbus.
Además, Iberia opera en la actualidad 17 aparatos A 340-300, tiene dos A 340-600 en alquiler, y ha comprado tres unidades de este último modelo que le serán entregados en el próximo año.
En las negociaciones con el fabricante europeo Iberia quiere introducir la posibilidad de contratar alguna opción de compra sobre el superavión A 380.
Por esta cláusula la compañía podría decidir adquirir unidades de este aparato capaz para transportar más de 500 pasajeros, a cambio de renunciar a alguna opción del A 340.
General Electric mantendrá los aviones de Air Nostrum
La aerolínea Air Nostrum, propiedad de la familia de Emilio Serratosa, firmó ayer un contrato con General Electric (GE) para el mantenimiento de los motores de su flota de aviones CRJ-200. El contrato, que tiene una vigencia de 10 años, asciende a 75 millones de dólares. El mantenimiento se realizará en Madrid por parte de Iberia, que ha obtenido la subcontrata de GE para realizar las operaciones con el motor fabricado por el gigante estadounidense.Hasta la fecha, el mantenimiento de estos motores se realizaba en Alemania por parte de Lufthansa. Según el consejero delegado de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, el nuevo contrato permitirá ahorrar un 30% del gasto de mantenimiento de motores, que es la partida mayor en la cuenta de gastos de una compañía aérea. Bertomeu destacó, además, la importancia de eliminar la volatilidad del precio de estas operaciones, ya que el contrato garantiza un precio máximo a 10 años. Air Nostrum contará en 2003 con una flota de 31 CRJ y 19 Q300, aunque estos últimos montan otros motores, por lo que no serán mantenidos por GE. 'Estamos negociando un contrato similar con otra empresa', adelantó Bertomeu. El consejero delegado de Air Nostrum destacó la política de la compañía de cerrar acuerdos a largo plazo, como la franquicia que mantienen con Iberia o el de renovación de flota con Bombardier. Bertomeu confirmó, asimismo, la venta de la filial holandesa de Air Nostrum, Denim Air, a sus gestores. La compañía valenciana compró esta empresa de alquiler de aviones con tripulación para solventar la falta de aparatos en la época de mayor crecimiento. 'Una vez superada esta etapa, la vendimos, tal y como estaba previsto', dijo Bertomeu.