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Directivos

Teatro para transformar la compañía con humor

La consultora Imantia lleva el teatro a las empresas para mejorar la comunicación de los equipos directivos e incentivar la inteligencia y la productividad

Le convocan a la reunión de directivos de su empresa y, cuando llega al salón de actos, se encuentra usted con un señor que, al son de una música de baile, se quita la ropa de calle revelando que lleva puestas unas medias de señora y una combinación de lencería. Después se viste con una falda de lunares y una blusa estampada a base de flores azules de estilo japonés. Empieza a peinarse con coquetería ante un espejo imaginario, se cuelga unos pendientes en forma de margarita y comienza a quejarse de que su madre quiere impedirle que se case con un hombre enano.

No se asuste. No es una pesadilla. La alta dirección no se ha vuelto loca. En realidad, se trata de lo último en técnicas de liderazgo empresarial a cargo de la empresa Imantia. Esta consultora de recursos humanos ofrece todos los servicios habituales, como son el estudio del cambio, la dirección por objetivos o la evaluación del potencial. En su división de formación también aportan soluciones de enseñanza presencial, entrenamiento en exteriores, aprendizaje electrónico, o tutorías para jóvenes ejecutivos. Pero además se arriesgan. Son los únicos de España que incluyen formación mediante teatro de empresa.

Extinguir el miedo

El actor profesional que evoluciona frente a los atónitos directivos es el brasileño Raúl de Orofino. Su montaje tiene un objetivo sorprendente porque es a un tiempo archiconocido y novedoso. Todo el mundo sabe que el sentido del humor es tan útil en el trabajo como en la vida. Pero, curiosamente, nadie parecía haber asumido que si es un arma tan importante, entonces debería ser uno de los principales objetivos de la organización. Berta Méndez, accionista de Imantia, explica que de niños nos reímos unas 300 veces al día, pero cuando llegamos a adultos casi nadie pasa de las 30.

Orofino asegura que el humor mejora la productividad 'porque combate el miedo', especialmente en una era dónde los cambios se suceden muy de prisa. En su opinión, 'los acontecimientos se producen como hechos, simplemente suceden', aunque a veces no nos gusten. Cuando se toman con humor, uno deja de ser una víctima y toma el control.

Si un superior o un compañero nos hace la vida imposible, la alegría nos permite ver que son ellos los que tienen el problema, no uno mismo. Lo cual nos puede dar la entereza necesaria para modificar esa relación. O, en el peor de los casos, si los enfurecidos no tienen recuperación, el sentido del humor nos hace más fuertes y nos permite buscar otro trabajo con optimismo, sin sentimientos de culpabilidad.

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