Endesa negocia con BG un contrato de suministro de gas a largo plazo
Endesa proyecta controlar en torno al 22% del mercado liberalizado peninsular español de gas natural en el horizonte del año 2007. De ese porcentaje, un 15% correspondería a los clientes que hayan optado por salirse de tarifas, mientras que el otro 7% sería el referido al suministro de sus centrales de ciclo combinado. Esas proyecciones, que se basan en las cuotas que ya ha alcanzado la primera eléctrica española y en las medidas que ha puesto en marcha, se corresponden con una previsión de consumo global en ese año de unos 35 bcm (miles de millones de metros cúbicos).
En la actualidad, la empresa que preside Manuel Pizarro controla cerca del 7% de la actividad gasística liberalizada, lo que la convierte en la primera eléctrica en ese área, aunque muy por detrás de Gas Natural, con un 65,5%, y con una ligera desventaja respecto a la petrolera británica BP. El mercado liberalizado del gas afecta en la actualidad al 68% del total del consumo.
Endesa mueve ahora al año cerca de un bcm en el área destinada a sus clientes liberalizados, gas que proviene del 0,4 bcm adjudicado del contrato de Argelia que se transporta por gasoducto, mientras que el resto de hidrocarburo es adquirido por la eléctrica en el mercado spot, dadas las buenas condiciones que se pueden obtener en la actual coyuntura. Adicionalmente, Endesa tiene cerca del 5% del mercado de distribución, cuota que corresponde básicamente a su filial Gas de Aragón.
Partiendo de esta situación y con el mencionado objetivo de alcanzar un 22% en el año 20076-2007, Endesa ha diseñado una estrategia que abarca los tres ejes básicos de la llamada cadena del gas: la contratación de la materia prima, la participación en la infraestructura y la política de comercialización cara a la obtención y fidelización de los clientes.
La empresa que preside Manuel Pizarro afronta esta actividad con la idea de no participar en la actividad de exploración y producción de gas, por lo que intenta asegurarse el abastecimiento, para posteriormente suministrar a sus clientes, con contratos con empresas o países productores.
Sonatrach
La compañía cuenta además con un acuerdo con Gas Natural que asegura el gas a sus centrales de ciclo combinado en España, que puede elevarse hasta tres bcm para los 3.000 megavatios que prevé instalar en la Península. Es un contrato, según medios consultados, muy eficaz para ambas partes, que además tiene resuelto un tema que para otras empresas es todavía un problema: la reserva de la capacidad de procesamiento y transporte por parte de Enagás. La eléctrica alcanzó además un acuerdo con la argelina Sonatrach que le proporcionará 0,4 bcm a partir del año 2004 y un bcm desde 2008.
En cuanto a sus clientes a tarifa, área en la que quiere profundizar dados las diferencia de márgenes respecto a los clientes industriales, tiene asegurado su abastecimiento a través de Enagás.
Endesa tiene ahora cubierto el 75% de sus necesidades previstas del año 2005 y su objetivo es llegar al 85%, ya que el resto se solventará en el mercado spot, el cual está en crecimiento según los analistas.
Pero ante las previsiones de 2007, negocia contratos a largo plazo que pueden sumar entre cinco y seis bcm, ya que además de los clientes que prevé obtener en España es preciso añadir los tres bcm que tendrá que destinar a Italia. Allí, el gas será consumido por sus centrales de Endesa Italia (antigua Elettrogen), que se transformará en ciclos combinados. Ese proceso afectará a unos 3.000 megavatios.
En esta línea, además de los contactos con Nigeria, Omán, Angola y Qatar, Endesa mantiene negociaciones con BG (antigua British Gas). Este grupo, que está especializado en la exploración, transporte y distribución de gas, tiene intereses entre otros países en Egipto, de donde previsiblemente suministraría el hidrocarburo. Pero este grupo británico cuenta además con intereses en Trinidad y Tobago, por lo que la eléctrica española se podría beneficiar de un mix de estos dos activos.
Respecto a las infraestructuras en España, su política se basa en la participación en varias plantas de regasificación: Reganosa, en Ferrol (21%); Sagunto (20%), y un 30% en los proyectos canarios. También cuenta con un 12% de la sociedad Medgaz, que estudia la viabilidad de un nuevo gasoducto entre Europa y Argelia.