La confianza de los empresarios de EE UU cae por segundo trimestre
El índice de confianza de los directivos empresariales de EE UU cayó, por segundo trimestre consecutivo, entre julio y septiembre hasta situarse en 54 puntos desde los 61 del trimestre anterior, según informó ayer The Conference Board. El porcentaje de los empresarios que creen que la economía está mejor ahora que hace seis meses ha caído al 29% desde el 62% anterior y los que creen que el panorama ha empeorado alcanzan el 37% de los encuestados frente al 14% de hace tres meses.
Pese al pesimismo que destilan estos datos, los empresarios se inclinan en mayor porcentaje por aumentar los gastos de inversión (un 11% frente al 8% anterior), aunque todavía un 38% (47% hace tres meses) prefiere aplazar estos gastos.
Incertidumbre económica
Y es que la tendencia futura de la economía estadounidense aún no está clara. Como reconocía el propio presidente de la Reserva Federal de Chicago, Michael Moskow, el grado de incertidumbre es alto. 'El contexto geopolítico, el impacto de los escándalos contables y empresariales, tan cercanos a la recesión de la economía del año pasado han dificultado la marcha de la economía', dijo.
Entre los riesgos señalados por Moskow está la posible guerra contra Irak, que ha añadido más cautelas al comportamiento empresarial. Sin embargo, el banquero aseguró que la recuperación seguirá adelante gracias a la política monetaria y fiscal, el robusto crecimiento de la productividad y el amplio margen de recuperación que presentan los inventarios.
Pero la realidad de los datos se empeña en cuestionar el discurso oficial. Por un lado, el mercado reaccionó ayer con optimismo a los datos del índice de actividad en el sector servicios del Instituto de Gestión de la Oferta (ISM, por sus siglas en inglés) que subió en septiembre de 50,9 a 53,9 puntos. Se trata de la primera expansión de la actividad del sector después de tres meses de ralentización del crecimiento y los inversores interpretaron el dato como un punto de inflexión.
Otros datos sugieren, sin embargo, que el conjunto de la economía permanece débil. El número de solicitudes semanales de subsidios de desempleo creció la semana pasada en 5.000, hasta situarse en 417.000 peticiones, lo que supone la sexta semana consecutiva por encima del nivel de 400.000 asociado a debilidad en el mercado laboral.
La media mensual de estas solicitudes ascendió a 423.000, lo que supone el nivel más alto desde el pasado mes de mayo, cuando la economía estaba creciendo a un ritmo del 1,3%.
Eso explica, en parte, que los pedidos de bienes duraderos, excluidos aviones y otro material de transporte, cayera un 0,1% en agosto después del incremento del 1,2% registrado en agosto. En el conjunto del año, los pedidos de bienes duraderos se encuentran un 2,3% por debajo del nivel alcanzado en los ocho primeros meses de 2001, en plena recesión económica.
La divisa estadounidense refleja en su cotización las dudas sobre la economía. El dólar llegó a cotizar a 0,9907 unidades por euro, aunque el positivo resultado del sector servicios le permitió recuperar parte del terreno perdido y cerrar a 0,9873 centavos por moneda europea.
A finales de este mes se conocerá el dato del crecimiento del PIB en el tercer trimestre. Muchos economistas y altos cargos de la Administración coinciden en calcular un aumento del PIB del 3,5%, lo que supondría una clara recuperación frente al desempeño del segundo trimestre (1,3%).