La patronal japonesa se muestra pesimista sobre la economía
Los empresarios japoneses continúan mostrándose pesimistas frente al futuro de la economía nipona. El índice Tankan, realizado por el Banco de Japón y barómetro del sentimiento empresarial, se situó en septiembre en -14. Una lectura negativa muestra que de las 8.500 compañías encuestadas, los empresarios que se muestran pesimistas superan a los optimistas. El dato de ayer se suma al de los seis trimestres anteriores, en los que también hubo números negativos. No obstante, el índice mostró una mejoría de cuatro puntos frente al Tankan de junio y se situó en el nivel más alto desde marzo de 2001.
'Parece que ha habido un pequeño avance', afirmó el ministro de Finanzas, Masajuro Shiokawa, tras presentarse el informe. 'Creo que, de alguna forma, el ritmo de caída se ha desacelerado. Dicho eso, a la economía le falta impulso', añadió.
Heizo Takenaka, ministro de Economía y de Asuntos Financieros desde el lunes, comentó que el Tankan muestra ciertos riesgos para la recuperación, mientras que el portavoz del Gobierno, Yasuo Fukuda, aseguró que 'hay signos de que la economía se recupera, aunque el ambiente no es exactamente el necesario. De hecho, se está volviendo más difícil'.
El Tankan revela que entre los empresarios sigue dominando la intención de recortar costes. Según el índice, las grandes firmas prevén recortar sus inversiones un 6,2% este año fiscal, que terminará en abril de 2003.
Las estimaciones sobre los resultados han empeorado frente al Tankan de junio. Así, las grandes empresas industriales prevén un aumento del 31% de los beneficios este ejercicio fiscal, frente al 34% de subida pronosticado en junio.
El índice muestra también que la actitud de las instituciones de crédito frente a las firmas pequeñas es negativa (-10). Este resultado significa que las pequeñas empresas, fuertemente dependientes de los créditos, soportan condiciones muy severas para acceder a los préstamos.
El primer ministro de Japón, Junichiro Koizumi, destituyó el lunes pasado a Hakuo Yanagisawa como responsable de la Agencia de Asuntos Financieros y puso en su lugar a Takenaka, un reformista, lo que ha hecho pensar a los inversores que Koizumi pretende aplicar reformas para sanear a la banca.
Las estimaciones de los empresarios se basan en que el dólar se situará en un cambio de 122,70 yenes, frente a los 125,73 previstos en junio. La divisa nipona bajó ayer hasta 122,43 unidades por dólar, desde las 121,74 del lunes.