Vivendi acelera la venta de activos para captar 12.000 millones en 18 meses

El presidente de Vivendi Universal, sin embargo, no fue claro a la hora de abordar el principal punto en cuestión sobre la estrategia de la compañía. Su decisión de permanecer o no en el capital de la filial de tratamiento de aguas y recogida de residuos Vivendi Environnement.

Tras declarar que nunca había afirmado que fuera a reducir de nuevo su posición en esa empresa de servicios, explicó que ahora su intención era sentarse a negociar un marco de relaciones con el equipo directivo de su filial. Asimismo añadió que en todo caso cualquier eventual venta de su 40% no se realizaría a través de colocaciones de acciones en Bolsa.

Fourtou sí se refirió a la crítica situación por la que ha atravesado la empresa y reconoció que 'la credibilidad de la compañía está en estos momentos muy cercana a cero'. Aunque precisó que la crisis de liquidez ha quedado ya definitivamente atrás.

El primer ejecutivo de la compañía explicó la crisis sufrida por Vivendi Universal por la decisión del anterior presidente, Jean-Marie Messier, de dar un dividendo extraordinario a principios de año de 1.000 millones. Sus planes de futuro pretenden concentrar la compañía en el negocio multimedia y para ello se propone poner en venta activos como la división de publicaciones -en la que se encuentra integrada la editorial española Anaya-, las actividades de Canal + fuera de Francia, menos España, y los negocios de telefonía no franceses -en donde se encuentra el 29,4% que posee en la española Xfera junto a FCC- y la participación en la compañía de videojuegos VU Games.

Sí precisó que el proceso para la venta de la compañía telefónica francesa Cegetel se encuentra abierto y en el mismo hay negociaciones a tres bandas entre BT, SBC y la propia Vivendi Universal. Además aseguró estar dispuesto a vender sus negocios en el campo de la prensa, propiedades inmobiliarias, aviones, activos de producción de energía, etc.

Todo ello con el objetivo declarado de obtener unos 12.000 millones de euros de ingresos en los próximos 18 meses. Hasta ahora el objetivo de la empresa era lograr 10.000 millones de euros en dos años.

Ayer mismo ya se sustanciaron dos de estas desinversiones: Thomson Multimedia firmó el acuerdo de compra de Canal + Technologies por un total de 190 millones de euros y el grupo News Corp, propiedad del magnate australiano Rupert Murdoch, materializó la adquisición de la cadena de televisión de pago Telepiú en Italia por 1.000 millones.

Además de concretar el anunciado proceso de venta de activos, Fourtou ha procedido a reducir las dimensiones del consejo, que tendrá a partir de ahora 12 miembros, frente a los 17 anteriores.

Esther Koplowitz es uno de los vocales que abandona su cometido, aunque seguirá en el de la filial de medio ambiente.

La copropietaria de FCC había presentado su dimisión el pasado mes de mayo, pero es ahora cuando se formaliza, según fuentes cercanas a la empresaria, porque en su momento hubiera agravado la crisis del grupo multimedia.

Fourtou incorpora al consejo a Fernando Falcó y Fernández de Córdoba. 'He insistido para que un español esté presente en el consejo de administración de Vivendi', manifestó Fourtou, en la conferencia de prensa de presentación de sus planes de futuro del grupo.

Jean-René Fourtou calificó de importantes los intereses del grupo de comunicación en España, donde sus activos no serán vendidos. Falcó, persona próxima a Esther Koplowitz, es un viejo conocido del presidente de Vivendi, quien ayer catalogó a España de país estratégico para el grupo.

Una hipotética venta de acciones de Environnement podría arrojar de nuevo alguna incertidumbre sobre el futuro accionarial de Fomento de Construcciones y Contratas.

Koplowitz tendría derecho a recomprar a los franceses su paquete del 27% en el grupo si entra un socio no deseado en la filial de Vivendi. En ese supuesto, el precio sería el pagado en 1998 por la multinacional para entrar en la firma española, que hoy día es superior al de cotización en Bolsa.

Permanencia en Sogecable

 

 

Fourtou fue ayer tajante en lo que se refiere a las participaciones que posee en las sociedades que controlan el desarrollo de la cadena de televisión Canal + fuera de Francia. La puesta en venta de la mayor parte de ellas (Italia, Polonia, Benelux y Escandinavia) obedece a las enormes pérdidas que originaban.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El comunicado difundido ayer por la multinacional francesa deja claro que los proceso de venta en las filiales de Canal + excluyen la participación que posee en la española Sogecable, en donde existe un pacto de accionistas con el grupo Prisa.

 

 

 

 

 

 

 

Aparte de la contención de pérdidas que ha tenido que afrontar en Canal +, Vivendi Universal ha decidido acabar con sus actividades en Internet, debido a los elevados números rojos que esta actividad le generaba. A la venta reciente de Vizzavi a Vodafone se unirán ahora los cierres de los portales Scoot y Divento. Todos los demás activos en esta área serán vendidos o integrados en las sociedades a las que reportan. También como medida de contención de gastos la empresa ha optado por reducir costes en sus sedes de París y Nueva York, y recortar su inversión en patrocinios deportivos.