La formación bruta de capital fijo lleva dos años de descensos en Europa
La formación bruta de capital fijo se redujo por sexto trimestre consecutivo en la Unión Monetaria Europea en el segundo de este año, lo que supone que en tasas interanuales lleva dos años de contracción. De hecho, en los 10 últimos años nunca la zona euro ha acumulado un periodo tan largo como el actual de descenso de la inversión. Sólo en el ejercicio de 1993 se produjo un descenso de las tasas de crecimiento de la inversión, aunque en tal caso la caída fue muy pronunciada (6,1% frente a caídas del 0,6% en 2001 y algo más del 2% en 2002 en el primer semestre).
En un análisis detallado de la inversión en la zona euro, elaborado por el Banco Central Europeo, las categorías de productos más importantes son los metálicos y la maquinaria, que junto con la vivienda y la construcción no residencial representan cerca del 80% de la inversión total en la zona en los 10 últimos años.
Desde 1995 la inversión en productos metálicos y en maquinaria se ha convertido en el componente más dinámico, constituyendo casi el 31% de la inversión total en el 2001, frente al 25% de la vivienda y el 24% de la construcción no residencial. El consumo de inversión en vivienda y en material de transportes es el que ha tenido un comportamiento más contractivo en los dos últimos años, hasta el punto de hacer inclinar la balanza hasta valores negativos.
En la segunda mitad de los años noventa la tendencia más destacable es la desaceleración de la inversión en construcción no residencial, en buena parte como consecuencia de la desaceleración producida en Alemania, que había tenido una explosión de esta variable en los primeros años tras la unificación de su territorio.
Además, los planes públicos de inversión en construcción no residencial se redujeron notablemente en la segunda mitad de la década, que en términos relativos pierde peso por el avance fuerte de el gasto en transporte, equipamiento y productos metálicos.
Equipo informático
Pero el informe del Banco Central Europeo destaca especialmente el fuerte ajuste de las inversiones iniciado en 2001, como consecuencia de la paralización de la demanda final en la gran mayoría de los países europeos. Los mayores ajustes en la inversión se han concentrado en el equipamiento y en la construcción.
La formación bruta de capital fijo en equipamiento se redujo más inicialmente como consecuencia de un fuerte auge en los años anteriores para atender a la fuerte presión de la demanda final entre los años 1998 y 2000.
Mientras la construcción cede por el ajuste producido en Alemania, la inversión en equipamiento informático mantuvo su solidez pese a la recesión económica de los seis últimos trimestres, y pese a ser el componente que históricamente está más estrechamente ligado a la actividad global.
La formación bruta de capital fijo se redujo por sexto trimestre consecutivo en la Unión Monetaria Europea en el segundo de este año, lo que supone que en tasas interanuales lleva dos años de contracción. De hecho, en los 10 últimos años nunca la zona euro ha acumulado un periodo tan largo como el actual de descenso de la inversión. Sólo en el ejercicio de 1993 se produjo un descenso de las tasas de crecimiento de la inversión, aunque en tal caso la caída fue muy pronunciada (6,1% frente a caídas del 0,6% en 2001 y algo más del 2% en 2002 en el primer semestre).
En un análisis detallado de la inversión en la zona euro, elaborado por el Banco Central Europeo, las categorías de productos más importantes son los metálicos y la maquinaria, que junto con la vivienda y la construcción no residencial representan cerca del 80% de la inversión total en la zona en los 10 últimos años.
Desde 1995 la inversión en productos metálicos y en maquinaria se ha convertido en el componente más dinámico, constituyendo casi el 31% de la inversión total en el 2001, frente al 25% de la vivienda y el 24% de la construcción no residencial. El consumo de inversión en vivienda y en material de transportes es el que ha tenido un comportamiento más contractivo en los dos últimos años, hasta el punto de hacer inclinar la balanza hasta valores negativos.
En la segunda mitad de los años noventa la tendencia más destacable es la desaceleración de la inversión en construcción no residencial, en buena parte como consecuencia de la desaceleración producida en Alemania, que había tenido una explosión de esta variable en los primeros años tras la unificación de su territorio.
Además, los planes públicos de inversión en construcción no residencial se redujeron notablemente en la segunda mitad de la década, que en términos relativos pierde peso por el avance fuerte de el gasto en transporte, equipamiento y productos metálicos.
Equipo informático
Pero el informe del Banco Central Europeo destaca especialmente el fuerte ajuste de las inversiones iniciado en 2001, como consecuencia de la paralización de la demanda final en la gran mayoría de los países europeos. Los mayores ajustes en la inversión se han concentrado en el equipamiento y en la construcción.
La formación bruta de capital fijo en equipamiento se redujo más inicialmente como consecuencia de un fuerte auge en los años anteriores para atender a la fuerte presión de la demanda final entre los años 1998 y 2000.
Mientras la construcción cede por el ajuste producido en Alemania, la inversión en equipamiento informático mantuvo su solidez pese a la recesión económica de los seis últimos trimestres, y pese a ser el componente que históricamente está más estrechamente ligado a la actividad global.