El Dow Jones cae el 2,82% y pierde los 8.000 puntos
Las alertas sobre beneficios han tomado el protagonismo de los mercados esta semana para agravar aún más la crisis que azota a las Bolsas. Electronic Data System (EDS) fue ayer la responsable de inyectar miedo y nerviosismo en Wall Street como consecuencia de su advertencia sobre resultados. No es la única que ha agitado al mercado, otras grandes como JP Morgan, Oracle, Lucent, Honeywell y AOL son más ejemplos destacados de las últimas semanas.
Estos indicios de que la recuperación de beneficios empresariales tardará en llegar se unen a una retahíla de datos económicos, como los de ayer, que no paran de decepcionar. Las peticiones semanales de desempleo cayeron pero siguieron a niveles elevados mientras la construcción de nuevas viviendas cedió un 2,2% en agosto cuando se preveía un aumento. El índice de actividad económica de la Reserva Federal de Filadelfia sí agradó al aumentar un 2,3% desde la caída del 3,1% de agosto. Las pérdidas no se pudieron evitar. El Dow Jones cayó un 2,82% y perdió la barrera técnica y psicológica de los 8.000 puntos mientras el Nasdaq cedió el 2,85%.
Las acciones de EDS (-51,4%) sufrieron un duro golpe. La advertencia de beneficios de la compañía la víspera le costó una oleada de revisiones a la baja entre las que se encontraron Deutsche Bank y Credit Suisse First Boston.
IBM acusó la alerta de su rival al igual que el resto del sector y perdió un 6,36%. JP Morgan, Merrill Lynch y Lehman presionaron al valor con recortes. Coca-Cola (-2,82%) fue otra víctima de rebajas en este caso de UBS Warburg.
Morgan Stanley presionó al sector financiero. Anunció una caída de beneficios del 13% en el tercer trimestre que no alcanzó las expectativas.
Las Bolsas europeas no encuentran suelo y el escenario de ayer no hizo más que incrementar la espiral bajista en la que se encuentran inmersas. Los datos económicos que llegaron de EE UU y los últimas alertas sobre beneficios se unieron para dibujar el peor escenario posible.
Las principales plazas retrocedieron sin excepción, perforando soportes para estancarse en zona de mínimos. El Euro Stoxx 50 cotiza ya en el nivel más bajo desde noviembre de 1997.
En su informe mensual, el BCE reconoció que las caídas de las Bolsas podrían afectar a las economías de la región 'hasta cierto punto'. Los últimos indicadores conocidos estas semana dibujan un panorama poco esperanzador. En este contexto, las pérdidas volvieron a afectar a todo tipo de compañías y 17 de los 18 sectores del índice Stoxx cedieron. La alimentación, la excepción, ganó un leve 0,13%.
Sodexho Alliance sufrió la mayor caída del día tras anunciar que no ha alcanzado sus previsiones de beneficios en el año debido a errores de gestión en su división británica como el impago de facturas. Retrocedió un 30,1%.
La banca fue otra azotada. Deutsche Bank (-8%), entre los peores, se vio afectado después de que Moody's revisara a la baja la perspectiva sobre la compañía. La agencia de calificación hizo lo mismo con HVB (-6,92%) y Commerzbank (-5,12%).
La alerta sobre beneficios de EDS presionó a la baja a otras empresas de servicios informáticos como Cap Gemini (-8,2%) o CMG (-8,2%).
Alcatel (-17,7%) también cedió con fuerza entre temores de que efectúe una alerta sobre beneficios.
México tomó el protagonismo en la región y sufrió la mayor caída afectada por los indicios de desaceleración económica en EE UU. Perdía el 5,29% a poco del cierre. El peso también se debilitó hasta niveles no vistos desde febrero de 1999 y se intercambiaba por 10,17 dólares.
El sector bancario lideró las alzas en Japón un día después de que el Banco de Japón anunciara que comprará acciones directamente a la banca para socorrerla de las caídas acumuladas. Las telecos y la automoción también ayudaron al Nikkei, que ganó el 2,09% y se anotó el único avance destacado de la zona.