El nuevo IRPF fomenta las sociedades que gestionan inversiones personales
Hasta ahora, y en tanto no entre en vigor la reforma parcial del IRPF, la vida de una sociedad creada al único fin de gestionar un patrimonio personal lo tiene muy duro por la transparencia fiscal. Sin embargo, este panorama desaparece. La reforma del IRPF prevé la creación de un nuevo régimen de sociedades patrimoniales que hará que estas entidades sólo paguen un tipo único del 40% en el impuesto de sociedades y, lo que es más importante, tan sólo el 15% sobre las plusvalías por venta de inversiones a más de dos años.
En la actualidad, una sociedad de este tipo, primero paga el 35% del impuesto de sociedades y, luego, el beneficio social vuelve a tributar en el IRPF del socio, normalmente al tipo marginal más alto, ahora del 48%. De esta cantidad se resta el pago efectuado en el impuesto de sociedades. Además, las plusvalías con más de dos años de antigüedad ahora tributan al tipo marginal del IRPF y no al fijo del 18%. El ahorro de impuestos que logrará una persona física que administre sus inversiones a través de una sociedad será del 5%. Respecto a las plusvalías, el ahorro del nuevo sistema frente al antiguo podrá alcanzar el 33%.
Según afirma Enrique Fonseca, socio de Garrigues, 'estas sociedades van a tener un auge con el nuevo IRPF por su mejor situación'. Para Isaac Vivas, de Baker & McKenzie, el único problema que el nuevo régimen no soluciona es el doble gravamen por reparto de dividendos de la sociedad al socio que sea, a su vez, una sociedad. Así, el perfil de una patrimonial que más se adecuará a la nueva fiscalidad será la formada por socios personas físicas, con patrimonio medio y alto afectadas por el tipo marginal más alto del IRPF y que inviertan en activos que afloren plusvalías y no rentas como los fondos de inversión.
Merma de ingresos
Sin embargo, para CiU, este cambio va a suponer dos mermas de ingresos importantes que ha intentado paliar sin, de momento, éxito alguno. Por un lado, como los socios de las patrimoniales dejarán de tributar en el IRPF, este impuesto sufrirá un descenso en su recaudación. Por otro lado, aunque derivado de esta circunstancia, el impuesto sobre el patrimonio también recaudará menos.
Según explica Josep Sánchez Llibre, portavoz de economía de CiU, el pago final por el impuesto sobre el patrimonio está limitado al 70% de la suma de la base de IRPF y patrimonio. Así, cuanto menor sea el IRPF, menor será el límite del 70% y, por tanto, menos se pagará en patrimonio. Para solventar este menor ingreso, que afecta a las CC AA al tratarse de un impuesto cedido, CiU propone que en el IRPF de los socios se incluyan los dividendos y participaciones en beneficios. para que la base sobre la que actúa el tope del 17% sea mayor. Otra propuesta de CiU busca compensar el menor ingreso que las CC AA percibirán del IRPF y propone reconocer a éstas una participación del 33% en el rendimiento del impuesto de sociedades que proceda de las patrimoniales. Ninguna de las dos ha sido incluida por el PP, por lo que serán debatidas el próximo martes en el pleno.