El partido de Schröder no descarta una coalición con los conservadores
Los socialdemócratas no descartan una gran coalición con la CDU si ninguno de los dos grandes partidos consigue la mayoría el próximo domingo.
Así lo dejó entrever ayer Franz Müntefering, secretario general de los socialdemócratas, en una rueda de prensa celebrada en Berlín. 'Nuestra opción favorita es un Gobierno con los Verdes. Otras coaliciones, como una unión con la CDU, también son posibles, ya que así lo permite el sistema democrático. Pero por ahora no buscamos esas coaliciones', afirmó el político de la SPD.
Las últimas encuestas dan una ventaja de sólo tres puntos al Partido Socialdemócrata del canciller sobre su principal oponente, la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU). Se estrecha así la posibilidad de que la SPD pacte con los Verdes (al que los sondeos auguran un 7%) y de que la CDU forme coalición con los liberales de la FDP (que obtendrían un 8%, según las encuestas).
Sin embargo, si los comunistas del Partido del Socialismo Democrático (PDS) logran alcanzar el 5% necesario para obtener representación parlamentaria, el número de escaños requeridos para formar una mayoría gubernamental se elevaría, con lo que la opción de que la SPD se vea obligada a pactar con la CDU gana peso, según algunos analistas políticos. Una gran alianza de los dos grandes partidos sólo se produjo en 1966, bajo Georg Kiesinger.
Los comunistas, según una encuesta publicada el domingo por el Instituto de Investigación de Leipzig, ganan popularidad en los länder del Este del país, donde el sondeo les otorga un 18% de los votos.
Los inmigrantes entran en la campaña
Los conservadores están nerviosos por el giro que han dado las encuestas a favor del Partido Socialdemócrata y ello ha hecho que recurran a un peligroso tema, que no había sido tocado hasta ahora por ninguno de los partidos que acuden este domingo a las urnas: la inmigración.
Ayer, el ministro del Interior bávaro y el presidente de la región del Sarre (ambos de la CDU), presentaron el programa 'Menos inmigración y más integración', un plan de siete puntos alternativo a la Ley de Extranjería que el Gobierno rojiverde logró aprobar hace meses con muchas dificultades en el Parlamento. La CDU plantea ahora que, con cuatro millones de parados, Alemania debe reducir la entrada de inmigrantes de fuera de la Unión Europea.
La estrategia de los conservadores fue ampliamente criticada en las filas socialdemócratas y verdes, que acusaron a la CDU de 'prender fuego' y de emprender una 'campaña de pánico'. Schröder afirmó en Berlín que ya hay una ley que regula los impuestos y los límites de la inmigración. 'Es una expresión de abandono y agresividad hacia el consenso político si la CDU hace de la inmigración su principal tema'.