Fomento inaugurará la línea del AVE hasta Lleida el 20 de diciembre
Fomento y Renfe mantienen contactos con la Casa del Rey para fijar el día en que se realizará el viaje inaugural del tramo entre Madrid y Lleida de la nueva línea AVE que unirá la capital de España con Barcelona. La fecha que se baraja es el 20 de diciembre, aunque podría retrasarse al 21 de diciembre por problemas de agenda.
El arranque comercial efectivo de este tramo de 450 kilómetros se producirá el próximo 1 de enero de 2003, según los planes actuales que manejan Fomento y Renfe. La compañía ferroviaria que preside Miguel Corsini ofrecerá a partir de esa fecha dos servicios diferentes.
El primero entre Madrid y Lleida, con parada en Zaragoza, será realizado por dos trenes alemanes ICE-3 que Renfe ha alquilado por seis millones de euros durante 18 meses a la compañía Deutsche Bundesbahn. El tiempo de viaje que se baraja para el trayecto en esta primera fase es de unos 135 minutos a una velocidad promedio de 210 kilómetros por hora.
El segundo servicio que lanzará Renfe por la nueva línea AVE a comienzo del próximo año unirá Madrid con Barcelona en cuatro horas y veinte minutos aproximadamente. Esta relación será realizada por composiciones de Talgo VII equipadas con ejes variables. Estos trenes estarán arrastrados por locomotoras que deberán ser cambiadas en Lleida para salvar la diferencia entre el ancho de vía de la infraestructura nueva y de la antigua, que deberá seguir utilizándose entre la capital ilerdense y Barcelona.
Renfe prepara un tercer servicio de trenes lanzadera entre Madrid y Zaragoza con un tiempo de viaje en torno a 90 minutos. Para esta relación se utilizarán las composiciones tipo AVE que actualmente realizan el trayecto entre Barcelona-Valencia-Alicante con la marca comercial de Euromed. Fuentes cercanas al proyecto han asegurado que la compañía ferroviaria ya ha adquirido los carretones que son necesarios para adaptar estas cinco composiciones de tren a las exigencias de la nueva vía AVE de ancho internacional. No obstante, señalan que dicha adaptación no podrá culminarse antes del mes de marzo del próximo año, por lo que creen que el servicio de lanzaderas entre Madrid y Zaragoza tendrá que retrasarse hasta la primavera.
Modificar los ICE
Renfe ha negociado con la compañía DB (dueña de los dos trenes ICE con los que se inaugurará la línea) la modificación de distintos aspectos formales de dichas composiciones.
La empresa germana se ha mostrado inflexible a las peticiones de su homóloga española y no autoriza que se varíe ni tan siquiera el tapizado de los asientos o que se cambien los colores externos de los trenes. Al parecer, sólo permite incorporar unas pegatinas con la marca distintiva de AVE, la unidad de negocio de Renfe que explotará el servicio.
Junto a las obras de la estación de Zaragoza y de Madrid, el elemento de la nueva línea que presenta mayores problemas para el cumplimiento del calendario es la señalización tipo ERTMS que instalan la empresa italiana Ansaldo y Cobra.
Fuentes del Ministerio de Fomento no quisieron hacer ningún tipo de comentario alegando que 'de las inauguraciones sólo se informa con una semana de antelación'.
Zaragoza, una carrera contra el reloj
El último gran cuello de botella para que la línea Madrid-Lleida entre en servicio comercial es la obra de ejecución de la nueva estación de Delicias en Zaragoza, según distintas fuentes cercanas a este proyecto, desde los sindicatos a alguno de los suministradores. De hecho, la Federación de Metal y Construcción de UGT ha reclamado formalmente al Ministerio de Fomento que en aras de la seguridad de los trabajadores que ejecutan ese edificio se retrase la inauguración unos meses. Este sindicato dice que dadas las características técnicas de la estación, ésta no se puede ejecutar a la velocidad actual sin menoscabo de la seguridad. Es más, indica que aunque se inaugure oficialmente la línea Madrid-Lleida el próximo 20 de diciembre, el servicio comercial no se podrá prestar hasta que transcurran varias semanas.
Esta impresión tienen también algunos de los suministradores destacados de la línea, que señalan que la puesta en servicio en enero, si se produce, se hará sin que esté totalmente terminada la estación. Este periódico no ha podido recabar la versión de las constructoras encargadas del proyecto.
Por su parte, las obras necesarias en la estación de Madrid-Atocha marchan a mejor ritmo. Ya se han cambiado a ancho internacional cuatro vías de la estación para acoger a los trenes de esta nueva línea, con lo que quedan sólo cuatro de ancho español. Además, desde agosto se trabaja en las vías de salida de la línea AVE hacia Sevilla, en su tramo común con la de Barcelona.