Méndez detecta dificultades para la renovación del acuerdo salarial
El objetivo central de las reuniones mantenidas por Cándido Méndez era obtener el respaldo explícito de los grupos parlamentarios socialista y de Izquierda Unida a la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) apadrinada por UGT, en la que se apuesta por una reforma laboral que de estabilidad al empleo y contribuya a disminuir la siniestralidad. La iniciativa será votada en el Congreso como una proposición de ley el próximo 19 de noviembre y contará con el apoyo del PSOE e IU.
En UGT se concibe esta iniciativa como una alternativa a la reforma laboral promovida por el Gobierno el año pasado y que, a juicio de Cándido Méndez, no ha servido para rebajar los índices de temporalidad ni tampoco para fomentar los contratos a tiempo parcial. El portavoz del Grupo Socialista, Jesús Caldera, que participó en la reunión junto al responsable económico del PSOE, Jordi Sevilla, señaló que su partido respaldará 'con entusiasmo' la propuesta de UGT.
La iniciativa fue presentada hace ahora un año en el Congreso, que autorizó al sindicato a que recogiera las 500.000 firmas que se necesitan para poder tramitar la ILP. Estas fueron entregadas el pasado febrero.
En su comparecencia ante los periodistas, Méndez reconoció que hay dificultades para renovar el pacto salarial suscrito con los empresarios, al que las dos partes van a intentar dar continuidad en 2003. Ante las reiteradas amenazas del Gobierno de que una falta de acuerdo daría paso a la reforma unilateral de la negociación colectiva, Méndez aseguró que el Ejecutivo no debería inmiscuirse en la negociación, entre otras cosas porque concibe la moderación salarial sólo en clave de recortes, en contra de lo que se estila en el resto de la Unión Europea.
No obstante, Méndez reconoció que últimamente se están realizando esfuerzos desde el Gobierno para respetar la autonomía de las partes negociadoras. El líder sindical sostuvo que si finalmente se renovara el pacto salarial, el Gobierno tendría que aprovecharlo para favorecer el crecimiento económico y para crear empleo.
El secretario general de UGT achacó el aumento de la inflación a la falta de competencia en algunos sectores y al aumento de los impuestos indirectos. En su opinión, la evolución de los salarios tiene poco que ver con el aumento del IPC.
El dirigente sindical expresó su simpatía por los textos alternativos presentados por el PSOE e IU a la reforma del desempleo, aunque dejó claro que UGT no se vincula con ninguno, pues ha pedido desde el principio la retirada del decreto.
En su opinión, es lógico que PSOE e IU intenten exhibir su alternativa. Méndez añadió que, en todo caso, la enmienda a la totalidad del primer partido de la oposición persigue el mismo objetivo que la huelga del pasado 20 de junio, es decir, la derogación de las principales medidas incorporadas a la reforma.