Ahorradores argentinos reclamarán que el SCH y el BBVA respondan por sus depósitos
Un total de 1.300 ahorradores argentinos atrapados en el corralito solicitarán ante la justicia española que el BBVA y el SCH se hagan responsables por los fondos depositados en sus filiales argentinas.
Así lo informó ayer en la capital argentina el abogado Carlos Wiater, quien semanas atrás logró que la justicia española se declarara competente para tratar las reclamaciones de los ahorradores argentinos que tienen sus depósitos atrapados en los bancos Francés BBVA y Río, filial del SCH. Wiater consiguió involucrar a la justicia de España basando su petición en un reciente fallo del juez Alejandro Sánchez Freyre, de la ciudad argentina de Córdoba, quien sostuvo que los bancos extranjeros que tienen filiales en Argentina son responsables por la devolución de los fondos congelados.
Avanzando un paso más, Wiater anunció ayer que ha solicitado al estudio del abogado español Iván Hernández Urraburu que sostenga este fallo durante una audiencia de conciliación entre los ahorradores argentinos y los representantes del SCH y del BBVA que tendrá lugar en Madrid el 18 de septiembre. El principal argumento de Wiater para que la justicia española accediera a considerar el tema fue que la publicidad del Francés y del Río ofrecían el total respaldo de sus matrices españolas para captar clientes. Sin embargo, el BBVA y el SCH sostienen que no son responsables por la actividad de sus filiales, ya que éstas son entidades independientes. El Banco de España respalda esa postura.
Por otra parte, el Banco Central de Argentina puso en marcha ayer un nuevo sistema que autoriza la creación de nuevas cuentas corrientes y de ahorro de libre disponibilidad, en un nuevo intento de avanzar en un progresivo desmantelamiento del corralito. Esto supone que se podrá ingresar y retirar efectivo de esas cuentas sin restricciones, tanto de dinero que está fuera del circuito bancario como de los 1.200 pesos (330 euros) que, mensualmente, pueden retirarse de las cuentas corrientes y de ahorro congeladas.