La deuda de las eléctricas españolas crece un 1,8% en el primer semestre
Además de la venta de algunos negocios, la contención de las inversiones también ha resultado clave para moderar el crecimiento de la deuda. Así, las compañías han renunciado prácticamente a realizar grandes adquisiciones para consolidar las llevadas a cabo en años anteriores y han destinado la mayoría de la inversión a la mejora del servicio eléctrico en España.
En concreto, Endesa, la primera eléctrica española, acumulaba una deuda a finales del semestre de 23.434 millones de euros, lo que supone un descenso del 6,2% gracias a los movimientos de fondos realizados en el periodo y a las variaciones en el tipo de cambio respecto al euro.
Asimismo, los cambios en el perímetro de consolidación de la compañía implicaron la incorporación de 1.330 millones correspondientes a la deuda de Endesa Italia. También incidió en el cambio la reducción de 152 millones derivados del endeudamiento de Viesgo y otras sociedades que dejaron de consolidarse en los seis primeros meses de 2002.
En cuanto a la asignación de deuda, el negocio eléctrico de Latinoamérica supera ya al nacional y se lleva la mayor parte del endeudamiento, con 10.106 millones de euros, frente a los 11.525 de finales de 2001. Las inversiones europeas, por su parte, registran un endeudamiento de 1.963 millones por primera vez en la historia de la empresa, ya que antes no tenía propiedades en el Viejo Continente.
Aumento de Iberdrola y Fenosa
Por su parte, a 30 de junio, Iberdrola tenía una deuda financiera de 11.566 millones de euros, lo que supone un aumento del 7,2% respecto al cierre del pasado año, debido fundamentalmente al efecto del cambio en el perímetro de consolidación.
Además, la empresa presidida por Iñigo de Oriol realizó inversiones en activos de generación no incluidas en el plan estratégico, entre las que destaca la compra de los activos de Enron por 374 millones de euros.
El endeudamiento financiero neto de Unión Fenosa alcanzaba al cierre del semestre los 6.835,23 millones de euros, con un crecimiento del 2,4 % respecto al cierre del ejercicio 2001. La compañía realizó inversiones por importe de 167,03 millones en actividades eléctricas en España y acudió a la ampliación de capital de Auna, desembolsando 115,3 millones de euros.