Iberdrola revisará un crédito de 913 millones para parques eólicos
El desarrollo de Energías Eólicas Europeas (EEE), participada al 68,5% por Iberdrola, tiene el viento en contra. El retraso en la construcción de 31 parques eólicos en Castilla-La Mancha por problemas administrativos, de permisos y medioambientales, han provocado que EEE tenga que volver a negociar con 53 entidades financieras un crédito sindicado de 913 millones de euros.
Este crédito es el mayor del mundo destinado al desarrollo de las energías renovables y recibió a principios de este año el premio Euromoney a la mejor operación de financiación en proyectos del sector eléctrico europeo. Entre las entidades prestatarias se encuentran bancos como BBVA, Banesto, Crédit Agricole o el alemán West LB, y entidades de ahorro como Caja Navarra.
El préstamo iba a ser utilizado para la construcción de esa treintena de parques eólicos en Castilla-La Mancha. El retraso del proyecto de expansión de EEE que obliga a revisar el préstamo se debe a las dificultades que encuentra la compañía para salvar las trabas administrativas y superar las exigencias medioambientales de la Junta de Castilla-La Mancha.
Fuentes de la compañía eléctrica aseguran que en esta operación financiera no ha influido las diferencias que mantiene Iberdrola con Sodena, Caja Navarra y Cementos Portland, sus socios en EHN, titular de un 50% de Energía Eólicas Europeas, por el control y la gestión la compañía.
Energías limpias
El proyecto de Energías Eólicas Europeas es uno de los pilares sobre los que se asienta el desarrollo de Iberdrola en el campo de las energías renovables. La empresa dirigida por Ignacio Sánchez Galán tiene previsto invertir 2.500 millones de euros hasta 2006 para aumentar su parque de generación en el área de las denominadas energías 'limpias'.
La apuesta de Iberdrola por la generación de electricidad a través de las energías renovables parece clara. La eléctrica ha reactivado el plan para potenciar y sacar a Bolsa su filial al 100%, IbeRenova. Esta sociedad aglutina sus intereses en 19 compañías propietarias, fundamentalmente, de diferentes parques eólicos, y en la que se incluye también EEE.
La llegada al parqué de IbeRenova, en un porcentaje todavía por cerrar pero que rondaría el 30% del capital, permitiría conseguir a Iberdrola importantes recursos para desarrollar su participada. Sus resultados netos en 2001 ascendieron a 19,2 millones de euros.
Pacto en EHN para el reparto de activos
Las conversaciones de Iberdrola con sus socios en EHN para revisar con la banca los términos del crédito de 913 millones de euros para Energías Eólicas Europeas (EEE) no han conseguido enterrar las discrepancias que mantiene la eléctrica vasca con Sodena, Cementos Portland y Caja de Navarra. Las diferencias van más allá de la gestión y el control de EHN, un grupo cuyo frustrado plan era convertirse en la referencia mundial en el campo de las energías renovables tras la aportación, por parte de Iberdrola, de todos sus activos en este sector.
El distanciamiento entre los socios continúa, mientras sus asesores, Morgan Stanley por parte de Iberdrola y Salomon Brothers por el lado de los accionistas navarros de EHN, continúan valorando un grupo que va a ser troceado. Los primeros acuerdos de segregación parecen cerrados, aunque faltan todavía algunos flecos. Así, Energías Renovables Mediterráneas (Renomar), la sociedad que servirá para el desarrollo del parque eólico en la Comunidad Valenciana, saldrá de la órbita de Iberdrola, que tiene previsto cancelar anticipadamente un importante crédito concedido a esta filial para apoyar su desarrollo. Esta compañía, junto con otros activos radicados en Navarra, pasarán a formar parte de la cartera de Sodena, Caja Navarra y Cementos Portland.