El consejo de Deutsche Telekom debate hoy la sustitución de Sommer
El mercado alemán castigó ayer con dureza la cotización de las acciones de la operadora de telecomunicaciones Deutsche Telekom al hacerse público que hoy el Gobierno germano propondrá en el consejo de vigilancia de la compañía la sustitución del presidente Ron Sommer por un ejecutivo de la compañía, Gerd Tenzer, que ha apoyado tradicionalmente la estrategia de expansión impuesta por Sommer en la empresa.
Las acciones del gigante alemán perdieron ayer un 15,16%, la mayor caída diaria del valor desde que en 1996 fuera colocada en Bolsa. Los títulos de la compañía han perdido un 90% de su valor desde marzo de 2000, reflejando así las enormes dificultades que la compañía padece para hacer frente a su enorme deuda -67.000 millones de euros-.
Los analistas esperan hoy un consejo de vigilancia enormemente conflictivo, ya que no se prevé que Sommer, a la luz de los movimientos que ha realizado en los últimos días, no se rinda y entregue el cargo sin presentar batalla.
Ron Sommer se ha asegurado ya el apoyo de los trabajadores de Deutsche Telekom. En una carta publicada la semana pasada en varios periódicos alemanes, logró que 18.000 trabajadores de la compañía rechazaran las intenciones del Ejecutivo germano -propietario del 43% del capital- de cambiar la presidencia.
En paralelo, fuentes cercanas a la compañía aseguraban ayer que el consejo de administración está dividido sobre la sustitución de Sommer y algunos de sus miembros rechazan abiertamente la idea.
Desilusión
Esta escasa definición provocó ayer una importante desilusión entre los inversores, que apuestan decididamente por un cambio radical de política en Deutsche Telekom.
'La compañía necesita un giro de 180 grados. Es imprescindible un programa de venta de activos y Tenzer no parece tener el mejor perfil para liderar las desinversiones. El departamento que dirige en Deutsche Telekom no ha encontrado comprador para seis de los nueve canales de televisión por cable que la empresa estaba obligada a vender', explicaba ayer un analista.
El debate de la sustitución en la presidencia de Deutsche Telekom ha entrado de lleno en el debate político alemán y se ha convertido en un elemento de la confrontación electoral que protagonizan los dos principales partidos políticos alemanes de cara a las elecciones generales del próximo mes de septiembre.