Rato retiene la política energética con una Secretaría de Estado
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, mantiene el control de la política energética con la creación de una Secretaría de Estado, para cuya responsabilidad fue nombrado ayer por el Consejo de Ministros José Folgado Blanco.
De esta forma, la competencia de la política energética sigue fuera del antiguo Ministerio de Industria (ahora Ciencia y Tecnología), pero se refuerza con la creación de una secretaría de Estado. Las grandes empresas industriales, especialmente las empresas eléctricas, habían manifestado en varias ocasiones la ausencia de una interlocución clara y de cierto rango en el Gobierno desde la desaparición del Ministerio de Industria.
La vacante creada en la Secretaría de Estado de Economía será ocupada por Luis de Guindos, nombrado también por el Consejo de Ministros. Guindos era hasta ahora secretario general de Economía y Política de Defensa de la Competencia. Además de estos dos nombramientos a propuesta del titular de Economía, el Consejo aprobó también el nombramiento del nuevo jefe de gabinete de Administraciones Públicas, cargo que recae en Ángel Fernández Díaz.
Deuda de Cataluña
La primera reunión del nuevo Gobierno sirvió para aprobar el proyecto de Ley de Sanidad Animal, que establece una nueva clasificación de sanciones por infracciones de riesgos sanitarios; las sanciones oscilan entre 600 y 1,2 millones de euros.
En materia de infraestructuras, el Consejo aprobó la licitación de las obras de plataforma de cinco nuevos tramos de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Zaragoza-Barcelona-Fronterafrancesa, por un importe de 165,46 millones de euros.
También dio el visto bueno a subvenciones de 3,4 millones de euros para que los ayuntamientos pongan en marcha juzgados de paz; un nuevo régimen de primas y cuotas de producción de tabaco, y una autorización de endeudamiento a la Generalitat de Cataluña de 733,63 millones de euros.