El FMI advierte que el crecimiento europeo en 2002 podría ser más débil de lo previsto
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha estimado que el crecimiento de la economía europea en 2002 podría ser "más débil de lo previsto", debido especialmente al deterioro de los mercados mundiales, según se recoge en un informe difundido hoy.
"En su conjunto, en ausencia de una recuperación mundial más fuerte, la reciente evolución sugiere que el crecimiento en 2002 podría ser en cierta medida más débil de lo previsto", ha subrayado el organismo, que no ofrece una previsión de crecimiento concreta.
El informe recuerda que "hasta hace muy poco", el Fondo preveía que la recuperación progresiva de la actividad económica en el primer trimestre del año se aceleraría por encima de su potencial en el segundo semestre, antes de volver a caer para estabilizarse en un nivel próximo a su potencial en 2003. Sin embargo, la reciente evolución de los últimos indicadores a corto plazo, la caída de los mercados mundiales y la apreciación del euro respecto a la divisa norteamericana "han perturbado la previsión inicial", aclara el documento.
En cualquier caso, la escalada alcista de la cotización de la moneda única frente al dólar constituye un "elemento positivo", según el Fondo, que ha elaborado este informe al término de una mesa de expertos sobre las políticas económicas de la zona euro. El organismo muestra su preocupación por la debilidad de la demanda interna en los países de la zona euro, aunque se muestra confiado en la capacidad de los países de la Eurozona para adaptarse a los criterios de convergencia definidos por el Pacto de Estabilidad.
En cuanto a la evolución de los precios, estima que los últimos acontecimientos "deben apaciguar" las inquietudes sobre la inflación al menos en cierta medida, y recuerda que su previsión apunta a que la inflación se sitúe "lentamente" por debajo del 2% en 2003. En su último informe sobre las perspectivas de la economía mundial, publicado en abril, el FMI auguraba que el Producto Interior Bruto (PIB) de la Eurozona crecerá un 1,4% en 2002 y un 2,9% en 2003.