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Andalucía

Un informe alerta sobre los fallos en el sistema regional de innovación

Andalucía, con el 14% del PIB español, sólo representa el 9,5% de la inversión nacional en I+D, aunque su principal asignatura pendiente en materia de innovación no es este escaso presupuesto, por debajo de las medias nacional y europea, sino su enfoque, que debe girar hacia la investigación aplicada a la empresa.

El camino a seguir lo marcan comunidades como el País Vasco, que invierte menos que Andalucía en investigación y tiene la mitad de producción científica a cambio de un mayor número de patentes. La comunidad andaluza, sin embargo, ocupa un importante puesto en trabajos científicos publicados (14% del total nacional).

El informe que presentó ayer la Escuela de Organización Industrial, a cargo del mismo equipo que realiza los informes anuales de la Fundación Cotec para la Innovación Tecnológica, revela también la 'insuficiente' inversión en I+D de las empresas andaluzas y el protagonismo de las universidades, responsables de la mitad del gasto público en I+D y del predominio de la investigación básica andaluza en detrimento de la aplicada. A nivel empresarial y por sectores, sólo destaca la I+D que desarrollan las empresas andaluzas aeronáuticas.

Sin capital riesgo

Otro punto negro tiene que ver con la deficiente financiación de la innovación andaluza, como se ve en los datos que arroja el sector del capital riesgo, que sólo representa el 1% del total nacional. En cinco años, desde 1997, el capital riesgo andaluz ha caído 15 puntos.

Esta situación de 'atraso', como explicó Emilio Fontela, catedrático de la Universidad de Ginebra y autor de la investigación al igual que Eric Morand, tiene su contrapartida en que el sistema andaluz de innovación muestra signos claros de avance. A este respecto destacó que las inversiones de las empresas están en ascenso, por encima de la media nacional, y también las de la Administración autonómica, que desde 1995 crecen a un ritmo medio del 5,5%.

Fontela, que considera la innovación como la clave del desarrollo futuro de las regiones, resaltó también las políticas de la Junta destinadas a corregir este atraso y la desconexión entre investigación y empresa, articuladas en torno al Plan Director de Innovación Tecnológica (Pladit). 'Andalucía genera conocimiento, pero no logra que se transforme en riqueza', resumió Fontela en alusión a la definición misma de innovación.

La investigación de la EOI, la primera de estas características que realiza en Andalucía, incluye la opinión de 75 expertos y profesionales del mundo de la innovación, que vienen a corroborar lo que ya dicen los datos estadísticos.

Así, estos expertos valoran el esfuerzo que está haciendo la Junta por fomentar la innovación, aunque también detectan otros síntomas. Por un lado, critican la escasa cultura de la cooperación entre empresas y de éstas con los centros de investigación, y sostienen que las universidades y los organismos públicos 'no consideran una prioridad las necesidades de las empresas'.

Además, los expertos entienden que el atraso del sistema andaluz de innovación también se explica por un 'problema cultural', de falta de concienciación, que será de más difícil resolución.

Pese a todo, de las opiniones de los expertos se ha extraído el denominado índice EOI que arroja un saldo final positivo en el sentido de que Andalucía está mejorando la situación de su innovación.

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