La subida del candidato oficial en los sondeos frena el desplome del real
Las encuestas ofrecieron ayer un respiro a los mercados brasileños. El temor a la crisis ha impulsado al candidato oficial, José Serra, en las encuestas sobre intención de voto, aunque a larga distancia del candidato de izquierdas, Lula (36,1% frente a 20,9%). Pese a todo, el real se encuentra en mínimos frente al dólar y el riesgo-país se ha disparado hasta los niveles previos a la devaluación de 1999.
La moneda brasileña llegó a cotizar ayer a niveles mínimos de toda su historia frente al dólar, al caer hasta las 2,85 unidades desde el cierre de 2,84 unidades del viernes. El riesgo-país también abrió al alza y pasó de 1.706 a 1.758 puntos básicos en pocas horas.
Los temores de los inversores tienen cada día nuevos frentes. A la inestabilidad política derivada de la campaña electoral y las dudas sobre el pago de la deuda se sumaron ayer las declaraciones del secretario del Tesoro de EE UU, Paul O'Neill, que el pasado viernes desestimó una nueva asistencia financiera al país porque, justificó, el trasfondo de la crisis es político y no económico.
A lo largo del fin de semana, el líder del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inacio Lula da Silva, presentó una carta de intenciones en las que ratificaba su compromiso para honrar el servicio de la deuda externa y las políticas en favor del mercado desarrolladas por el actual presidente, Fernando Henrique Cardoso.
Pero los inversores hicieron caso omiso a sus palabras y se preparaban para vivir otra jornada de infarto.
Sólo la publicación de un sondeo sobre intención de voto, en la que el candidato oficial recortaba distancias con Lula, truncaron la tendencia a la baja del real y al alza del riesgo-país. Al cierre de esta edición, la divisa carioca cotizaba a 2,8 unidades por dólar y el riesgo-país se situaba en 1.649 puntos básicos. La bolsa también cambió su tendencia y pasó a números positivos.
Temor a la crisis
Según el sondeo del instituto Sensus, encargado por la Confederación Nacional de Transporte, el apoyo a Lula habría caído cuatro puntos desde mayo hasta alcanzar un 36,1% en intención de voto. El candidato oficial del centrista Partido de la Social Democracia Brasileña, José Serra, habría ganado 7,6 puntos y situaría su nivel de apoyo en el 20,9%, la distancia más corta desde marzo.
Los responsables del sondeo atribuyen el retroceso de Lula precisamente a las turbulencias financieras.
'El electorado está pasándose a Serra para mantener la estabilidad económica. Hay temor de una crisis económica', aseguró el director de Sensus, Ricardo Guedes.
'Va a ser muy difícil que Lula convenza a los mercados de que sus compromisos los va a poner finalmente en marcha', asegura el economista jefe de Bicbanco, Luiz Rabi.
Los analistas locales sostienen que la de ayer fue sólo una pausa dentro de un marco de turbulencias y que los mercados no recuperarán la calma hasta que las encuestas sean favorables a su candidato, José Serra. Las elecciones están fijadas para el próximo 6 de octubre.
El Banco Central también contribuyó a calmar la jornada, al anunciar un aumento del encaje bancario sobre los depósitos en cuentas de ahorro para afrontar las turbulencias en el mercado financiero.
Tras una reunión extraordinaria del Consejo Monetario Internacional, la entidad acordó que el porcentaje de depósitos de garantía de solvencia que deberán hacer los bancos (encaje sobre los depósitos) pasa desde ayer mismo del 15% al 20%.