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Quiebra

Vía Postal anuncia a la plantilla el cierre "ordenado" de la empresa

La compañía comenzó a tener graves problemas de tesorería a raíz de la salida de su socio financiero, el Banco Popular, en noviembre de 2001.

La compañía privada de envíos Vía Postal presentará suspensión de pagos la semana que viene a fin de iniciar los trámites de cierre de la compañía. El propietario y director general, Luis Sans, ha enviado una carta a sus trabajadores anunciándoles su intención de 'cerrar ordenadamente la empresa debido a su terrible problema de tesorería'. Esta falta de liquidez ha hecho que algunos de sus trabajadores lleven dos meses sin cobrar sus salarios.

El cierre significará la suspensión de pagos de la empresa y la puesta en marcha de un plan de regulación de empleo que afectará a todos sus trabajadores.

Sans reunió ayer a todos los trabajadores de la central de Madrid para informarles de la situación y de la posibilidad que tienen de adherirse al plan de regulación de empleo que se va a aplicar. Sans ha asegurado a los trabajadores que 'cobrarán todo lo que se les debe y que nadie se irá con las manos vacías'.

En la citada carta, Sans indicaba que tenía previsto vender la nave con la que cuenta en Getafe para posteriormente alquilarla, una operación que, sin embargo, no se ha podido cerrar.

El fundador se queda solo

Los problemas de tesorería comenzaron cuando su fundador Sans se quedó solo en la sociedad después de que sus socio financiero, el Banco Popular, salió del capital en noviembre de 2001. Entonces Sans pagó 3,6 millones de euros por el 50% del capital en manos de la entidad.

La decisión del Popular de salir de la compañía coincidió con la disputa que mantuvieron Vía Postal y Correos y Telégrafos en los juzgados. La empresa privada había denunciado a la empresa estatal por abuso de posición dominante y había puesto una demanda contra el director comercial de Correos, Héctor Lumbreras, 'por presiones a terceros que suministraban infraestructura a Vía Postal'. Por su parte, Correos denunció a la agencia L, propiedad de la familia Sans.

Vía Postal nació en mayo de 2001 para competir con la sociedad estatal en envíos. El plan de Sans radicaba en 'ser mejor en tiempo y en calidad que Correos'.

Vía Postal ha logrado instalar en cerca de un millar de quioscos puntos de recogida en grandes ciudades como Madrid, ha empleado a 900 trabajadores, frente a los 70.000 de Correos, y ha llegado a cerca de 3.500 empresas. En cuanto al tiempo de envío, una carta dirigida a un destino de la propia capital como Madrid tarda una media de 24 horas, mientras que en otras capitales de provincias se recibe en 48.

La actividad de Vía Postal se basa en la recogida y distribución del correo urbano de las principales ciudades, las cartas de entre 20 y 500 gramos y de todas las partidas interurbanas de publicidad, aunque Sans siempre ha querido apostar por el servicio de envíos masivos de grandes empresas y pymes.

Hace unos días los acreedores de Vía Postal exigieron suspensión de pagos para cobrar los servicios que la compañía no paga.

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